El Jurado de Enjuiciamiento de Neuquén resolvió destituir al juez de Garantías Marcelo Muñoz, involucrado en un accidente de tránsito. El Tribunal argumentó que su "comportamiento es inapropiado para su investidura", dado que el magistrado chocó, huyó, y se negó a hacer el test de alcoholemia.
El Jurado de Enjuiciamiento de la provincia de Neuquén resolvió destituir al juez de Garantías Marcelo Muñoz, quien chocó con su automóvil y huyó del lugar y, posteriormente, al ser detenido, se negó a realizarse el test de alcoholemia.
A través del Acuerdo N° 282, el Jurado de Enjuiciamiento consideró por unanimidad que se encontraba configurada la causal de mal desempeño prevista en la Constitución Provincial artículo 267 y en la Ley 1565, en virtud que el magistrado “se negó a realizar el control de alcoholemia" y "no prestó asistencia a las víctimas del impacto ni al momento de ocurrido el accidente ni a continuación”.
Durante los alegatos de cierre del jurado de enjuiciamiento al que fue sometido el magistrado, el representante del Ministerio Público Fiscal afirmó que “los hechos protagonizados por Muñoz han afectado su investidura y lo descalifican para seguir actuando como juez en el futuro”, y añadió que “perdió la autoridad moral que tiene que tener una persona a la cual se le encomendó la noble y delicada tarea de juzgar a sus pares, de establecer el valor de lo que está bien y lo que está mal”.
En los autos "Marcelo Germán Rubén Muñoz s/ Jurado de Enjuiciamiento", el tribunal destacó que el reproche “no trasunta por presuntas deficiencias o contravenciones durante la conducción de su rodado particular" sino por sus "conductas posteriores al siniestro vial".
En efecto, manifestó que “era claramente perceptible para el magistrado que en aquel automóvil se trasladara al menos un ocupante –el conductor-“, y que podía inferir también que “frente a una situación crítica de estas características, su rápida ayuda podía implicar una diferencia entre la vida y la muerte para los potenciales afectados”.
“Es cierto que afortunadamente ninguna de estas situaciones se verificó en un plano fáctico o real, pero era una probabilidad que necesariamente debió representarse Muñoz cuando decidió alejarse del lugar sin siquiera averiguar la envergadura del daño que había causado”.
Para el jurado, el juez “prefirió continuar con su marcha y conducir del modo en que pudo -con los airbags accionados, con el frente de su unidad claramente deteriorado, perdiendo fluidos- hasta su detención final, unos kilómetros más adelante”, y que "lo que logró detener la marcha fueron los problemas mecánicos de su automóvil”.
La resolución también señaló que el magistrado denunciado "tuvo una nueva chance de auxiliar rápidamente a las posibles víctimas" al “aportar a la policía los datos del otro vehículo siniestrado y el sitio del accidente”, pero en su lugar dijo que “colisionó contra un árbol a la vuelta, que estaba bien, que no necesitaba nada”.
En consecuencia, el jurado concluyó que su comportamiento fue “inapropiado para su investidura y claramente opuesto a la conducta que la comunidad tenía derecho a esperar de parte de este magistrado”.