La Cámara Criminal y Correccional sobreseyó al cantante canadiense de lo delitos que se le imputaron luego de la pelea que protagonizaron sus custodios con unos fotógrafos en un boliche durante su última visita al país.
En la causa caratulada “BIEBER, Justin s/ procesamiento”, el cantante canadiense fue procesado por considerarlo instigador de los delitos de robo simple reiterado, robo simple en grado de tentativa y lesiones leves durante su última visita al país. También se le trabó un embargo sobre sus bienes por la suma de $ 450.000.
El hecho puntual se desató en el boliche Ink cuando supuestamente el artista le pidió a su grupo de seguridad que impidan que tomen fotografías de él en el lugar y, para cumplir sus órdenes, los guardaespaldas le sustrajeron la cámara a una joven e intentaron hacer lo mismo con los dispositivos de los fotógrafos Diego Facundo Pesoa y Waldo Ariel Quisbert.
En los últimos días, los integrantes de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, Rodolfo Pociello Argerich y Ricardo Pinto, decidieron sobreseer a Justin Bieber porque no se comprobó que el cantante diera una orden directa a sus agentes de seguridad para que tomen las cámaras fotográficas de los implicados.
Los magistrados no compartieron el elemento de prueba que utilizó el juez de grado, la frase “go, go, go” que supuestamente habría expresado Bieber, ya que bien podría haber indicado su voluntad de retirarse rápidamente del lugar y no una orden de destruir el material.
En esta situación, "no parece razonable inferir que tales palabras implicaron la determinación concreta por parte de Justin Bieber hacia sus custodios para cometer delitos", expresaron los jueces.
Por último, los camaristas resaltaron que en ningún momento de la filmación que surge del archivo, en el cual se registró la salida completa del idolo pop, se lo ve bajar de la camioneta para impartir alguna orden a sus custodios.