El juez federal Mario Reynaldi realizó su descargo ante el Consejo de la Magistratura y negó las acusaciones en su contra por presunto "mal desempeño". En la denuncia se analiza la relación del magistrado con un ex comisario, investigado en una causa por el delito de trata de personas.
El juez del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Cruz, Mario Reynaldi, cumplió con la citación de la Comisión de Disciplina y Acusación por el artículo 20 del Reglamento. De este modo, el magistrado realizó su descargo en el expediente que tramita en su contra por presunto "mal desempeño de sus funciones".
La investigación se inició por una presentación del titular de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas, Marcelo Colombo, quien denunció la presunta relación entre el magistrado y ex policía Horario Herrera, imputado en una causa por el delito de trata de personas en la ciudad de Río Gallegos.
Según el fiscal, Reynaldi “no sólo ha mantenido una fluida comunicación con una persona imputada por el delito de trata de personas”, sino que “tenía conocimiento de la actividad desarrollada”.
El dictamen estará listo en las próximas semanas y podría culminar con la suspensión, juicio político y destitución del magistrado.
La acusación se centró en una serie de escuchas telefónicas entre el magistrado y el ex policía, cuyo teléfono estaba intervenido ante la sospecha de su supuesto vínculo con la explotación sexual de mujeres. Según consta en la documentación, el juez mantuvo con Herrera más de 70 conversaciones telefónicas y 32 mensajes de texto a lo largo de tres meses.
Tras una larga investigación, la instructora del expediente, Adriana Donato, solicitó la citación de Reynaldi por el artículo 20 del Reglamento, esto es, una especie de declaración indagatoria, donde los consejeros escuchan y le formulan preguntas al juez.
Concretamente le atribuyó "haber mantenido contacto habitual" con Herrera. También le endilgó “haber obtenido y utilizado información de una causa judicial para alertar a su amigo imputado sobre las medidas a efectivizar, a fin de beneficiarlo de tal modo, frustrando además la eficacia de la medida y perjudicando gravemente el curso de la investigación".
El juez no pudo evitar romper en llanto en varias oportunidades.
”Si Reynaldi mantenía contacto habitual con Herrera (…), la pregunta es cómo podía no saber que éste se dedicaba o tenía participación en la prostitución ajena y/o trata de personas, o al menos algún tipo de relación con las personas que perpetraban tal delito o se dedicaban a tal actividad ilícita”, advirtió la resolución mediante la cual se le imputó provisionalmente haber cometido diversas faltas reglamentarias y de conducta.
El dictamen estará listo en las próximas semanas y podría culminar con la suspensión, juicio político y destitución del magistrado.
La voz de Reynaldi
Ante la atenta mirada de los integrantes de la Comisión de Disciplina, el magistrado federal negó todas las acusaciones y aseveró que “desconocía” que Herrera estuviera involucrado en una causa judicial.
“Niego autoría y responsabilidad en los hechos que se me imputan”, afirmó el magistrado, quien no pudo evitar romper en llanto en varias oportunidades.
Puntualmente, Reynaldi confirmó su amistad con el ex comisario, pero afirmó que las comunicaciones fueron interpretadas de manera “errónea”. Además explicó que se contactó con Herrera para ayudarlo en un trámite vehicular y en una cuestión familiar.
Para finalizar, el magistrado efectuó un planteo de orden constitucional concerniente a las escuchas telefónicas. Al respecto, destacó que todas las intervenciones “fueron efectuadas al celular de Herrera, en el marco de la causa penal”, y consideró inconstitucional su utilización para cuestiones disciplinarias en su contra.