Según el diario Página/12, la carga de 77.000 toneladas de trigo a granel contaminado llegaron a Buenos Aires en un buque de bandera croata, fletada desde los Estados Unidos por la empresa Cargill en respuesta a un pedido de una subsidiaria local, Kraft Foods.
Según la información periodística, además de excremento de rata, en el cargamento se encontró una maleza denominada “cirsium arvense” que sería capaz de “destruir suelos y plantaciones”.
Los fiscales requirieron que se investigue el rol del consignatario, Nabisco y de las autoridades del buque Cikat que habría traído el cargamento al país para utilizarse en la fabricación de galletitas para el mercado interno.
“Realizada la primera inspección sanitaria, a cargo del Servicio Nacional de Calidad Agroalimentaria (SENASA) y de la Dirección Nacional de Aduanas, se habría detectado en un primervistazo que el trigo traía excrementos de roedores” y con “motivo de ese hallazgo, se extrajeron 200.000 kilos de muestra para ser analizados en profundidad”, aseguraron Freiler y Delgado.