Un informe reveló que en los últimos años se registraron 432 casos de secuestros extorsivos. Los hechos tienen mayor concentración en el conurbano bonaerense y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE) presentó su informe de gestión el cual contempla un análisis cualitativo de la modalidad en que ocurrieron los secuestros extorsivos, y cuantitativo respecto de la cantidad, duración y ubicación geográfica.
Del documento surge un total de 432 casos de secuestros extorsivos ocurridos en todo el país entre junio de 2016 y junio de 2019, que involucraron a 538 víctimas.
La Unidad, a cargo del fiscal federal Santiago Marquevich, señaló que entre los años 2002 y 2005 era más usuales los hechos en los que las víctimas permanecían cautivas entre una semana, quince días o incluso más de un mes y se exigían altas sumas de dinero para su liberación, al tiempo que las negociaciones se hacían a través de llamados telefónicos espaciados.
En los últimos años, según el documento, la modalidad mutó a los “secuestros exprés”, donde la víctima permanece privada de su libertad entre una y seis horas, los captores ejercen gran violencia verbal, psicológica y física con sus víctimas, a la que mantienen cautivas en vehículos y negocian los rescates a través del propio teléfono celular de la persona secuestrada.
Estos hechos tienen mayor concentración en el conurbano bonaerense y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; en una cantidad significativamente menor y de modo aislado ocurrieron secuestros extorsivos en las provincias de Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Tucumán, Formosa y Salta.
En 297 casos se concretó el pago del rescate. Se calcula que en los últimos tres años se pagaron $17.135.690; U$S 881.878, y €8.015 a cambio de la liberación de las víctimas. Los familiares y amigos de las personas secuestradas también entregaron como parte del pago diversos objetos personales de valor –joyas y electrodomésticos- hasta vehículos.
La mayor parte de los hechos ocurrió entre las 18 horas y la medianoche. Durante la madrugada la cantidad de secuestros es menor, según detalla el documento.
Las víctimas activas son hombres que viajan solos en un vehículo de gama media o alta, y la mayor ocurrencia de hechos se da los días jueves. Se registraron un total de 538 víctimas en el periodo analizado; mientras que en 337 de los 432 hechos participaron más de 3 autores.
En 297 casos se concretó el pago del rescate. Se calcula que en los últimos tres años se pagaron $17.135.690; U$S 881.878, y €8.015 a cambio de la liberación de las víctimas. Los familiares y amigos de las personas secuestradas también entregaron como parte del pago diversos objetos personales de valor –joyas y electrodomésticos- hasta vehículos.