El camarista federal Ignacio Vélez Funes renunció a su cargo luego se recibir varias denuncias ante el Consejo de la Magistratura de la Nación por supuestos hechos de violencia y acoso contra empleados de su dependencia.
A mediados de mayo, el integrante de la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba fue acusado por supuesto acoso laboral y maltrato, pero ahora sumó una gravísima denuncia por parte de una empleada que dijo ser víctima de acoso sexual y que tras rechazarlo fue sometida a discriminación y maltrato durante 20 años.
Desde la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN) denunciaron al juez por presuntos hechos vinculados con el “abuso de autoridad, amenazas, maltrato laboral cotidiano” que resultarían configurativos de violencia y acoso por razón de género”, expresaron en un comunicado.
“La violencia laboral, en sus diversas manifestaciones, atenta contra la dignidad humana y constituye una amenaza para la salud de los trabajadores y trabajadoras, en tanto que provoca efectos perjudiciales sobre su integridad física y psíquica”, expresó el gremio.
Vélez Funes no se expresó públicamente sobre las acusaciones, y ya se encontraba de licencia, por lo que no estaba concurriendo a su oficina de trabajo. Pero ahora presentó al Ministerio de Justicia su renuncia a partir del 1 de julio.
Además de la nueva acusación hay otros dos casos de presunto abuso sexual: uno ocurrido en 1986 en el Colegio de Abogados de Córdoba y otro en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
La Comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura iba a sortear la instrucción del expediente. Además, el gremio insistió en las últimas horas con “la suspensión urgente y preventiva del denunciado y su posterior remoción” de su cargo.
Vélez Funes no se expresó públicamente sobre las acusaciones, y ya se encontraba de licencia, por lo que no estaba concurriendo a su oficina de trabajo. Pero ahora presentó al Ministerio de Justicia su renuncia a partir del 1 de julio.