Oyarbide dictó ayer domingo el procesamiento con prisión preventiva de Beraja, y el banquero quedó detenido hoy, cuando se presentó en el juzgado. Inmediatamente, fue trasladado a la División Delitos Complejos de la Policía Federal, donde deberá cumplir con la detención ordenada por el juez federal.
En la misma resolución, Oyarbide también procesó con preventiva a Salomón Cheb Terrab, un ex socio de Beraja en algunas empresas, a quien acusó de ser el organizador de la asociación ilícita, además del delito defraudación por administración infiel y le trabó un embargo sobre sus bienes de 50 millones de pesos.
Al cierre de esta edición, Terrab aún no se había presentado ante la justicia, pero en el juzgado esperaban novedades “en las próximas horas”, adelantaron fuentes judiciales.
Beraja ya estaba procesado en esta causa, aunque solo por administración infiel, pero por la ampliación a la figura de asociación ilícita, que no es excarcelable, se le dictó la preventiva, confirmaron las fuentes.
En un dictamen de más de 160 carillas al que tuvo acceso este diario, Oyarbide concluyó que “desde 1993 hasta 1998 en que se produjo la caída del Banco Mayo existió una organización estable, permanente y sólidamente conforme que habría nucleado por un lado a directivos de Banco Mayo y por el otro a empresarios o sujetos formalmente ajenos a la misma pero vinculados a personas jurídicas”,.
Según el magistrado, esta organización operó otorgando préstamos a empresas-sello o insolventes, que nunca se recuperaban. Para Oyarbide, Beraja y Cheb Terrab “comandaron y organizaron la asociación delictiva”.
Según el titular del juzgado federal 5, “cada vez que se presentaba la posibilidad de seducir o de hacerse del dinero de algún incauto, la organización estaba preparada y lista para recibirla lo cual denota la predisposición de la asociación para cometer delitos indeterminados”, embistió.
Además, sobre Beraja, Oyarbide indicó que “como máxima autoridad del banco e indiscutido referente y líder de la colectividad judía en la Argentina es quien no sólo conducía los hilos del entramado lícito de la entidad sino de la organización ilícita que a expensas de ésta se montara”.
Según el magistrado en la causa se probó el manejo que se hizo de los 300.000.000 dólares que el Banco Central entregó al Mayo "en concepto deredescuentos como asistencia financiera por iliquidez entreseptiembre y octubre de 1998”.
Sigue el fallo detallando que, con ese dinero “lejos de adoptar recaudos para enfrentar la coyuntura”, se suscribieron “operaciones comerciales aparentemente irregulares en un contexto de iliquidez de la entidad incompatible con la toma de decisiones de esa naturaleza”. Según el juez, en “apenas seis semanas” se ocasionaron pérdidas por 200 millones de pesos”.
En la misma resolución Oyarbide dictó los procesamientos de varios imputados vinculados al Banco Mayo por los presuntos delitos de “estafa calificada, defraudación por administración infiel y asociación ilícita”, entre los que se cuentan León Laniado, Isaac Raimundo Duek, Abraham Fleisman, Felipe y Sergio Kompel, Alberto Tawil, David Malik, Víctor Liniado, Jaime Hasbani, Ricardo Elias Tobal, Alfredo Bigio, Jaime Yabra, Alberto Laham, José Naftali, Rafael Charur y Horacio Alegre.