Asimismo en la sentencia, el Tribunal de San Francisco destacó que la imagen de Barbie está "madura para el comentario social" y agregó que las fotos eran sólo una parodia y no suponían un perjuicio para la demanda realizada por Mattel.
En ese sentido, el fallo recordó que la crítica social esta protegida por la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, y confirmó la sentencia de primera instancia que en 2001 había autorizado las fotografías de esos juguetes.
En su recurso de apelación Mattel había afirmado que las fotos infringían sus derechos de autor y de marca comercial y que el artista utilizaba las muñecas en posiciones absurdas y a menudo como objeto sexual para su serie de fotos titulada "Cadena de Alimento Barbie" aunque el tribunal rechazó el recurso y autorizó la toma de las instantáneas.