El arrepentido Mario Pontaquarto y el ex jefe de la SIDE Fernando De Santibañes pasaron por Comodoro Py 2002 casi sin ser vistos, para cumplir con la notificación oficial de los procesamientos y embargos dictados por el juez Rodolfo Canicoba Corral la semana pasada por “cohecho”.
Fuentes de la defensa de Pontaquarto confirmaron que el hombre que reavivó la causa al autoincriminarse en “la ruta del dinero” de las coimas entre el Poder Ejecutivo y el Senado de la Nación durante el año 2000 dijo solo posee una casa, y es bien de familia y que no tiene otras propiedades para afrontar el embargo de 10 millones de pesos impuesto por el juez.
La defensa de Pontaquarto ya decidió apelar el monto del embargo dispuesto por el juez, y aún estudian –tienen plazo hasta el viernes- presentar una recurso ante la Cámara Federal para lograr que allí se reduzca el protagonismo del arrepentido en el hecho de partícipe necesario a secundario, confirmaron las fuentes. También apelarán las restricciones impuestas para salir del pais.
De Santibañes, por su parte, llegó pasadas las 11.30 de la mañana en el mismo automóvil break blanco que usó el día de su declaración indagatoria y el trámite fue breve: fuentes de su defensa aseguraron que el Señor 5 del gobierno de la Alianza presentó títulos de propiedades para completar la suma del embargo, fijado en otros 10 millones.
En los casos de los acusados por “cohecho pasivo”, los ex senadores Emilio Cantarero y José Genoud, los dos pidieron una prórroga antes de presentarse, por lo que el juez Jorge Urso, subroga a Canicoba Corral, de licencia, deberá fijar una nueva fecha.
Que declare Bielsa
En paralelo, el fiscal Federico Delgado pidió al juez Canicoba Corral que cite a declarar como testigo al canciller Rafael Bielsa, para que explique sus declaraciones periodísticas en torno a los “obstáculos” que habría encontrado al querer investigar las cuentas de la SIDE desde la Sindicatura General de la Nación.
Bielsa recordó el episodio cuando la causa coimas volvió sorpresivamente a las tapas de los diarios, en diciembre pasado. Por la revelación sobre las supuestas “trabas” el canciller fue criticado abiertamente por el ex presidente Fernando De la Rúa, quien en una presentación ante el juzgado de Canicoba Corral aseguró que el mismo revisó las cuentas de la SIDE y “estaban en orden”.