“Está claro que es un tema de decisión política, pero nos parece que no es posible una suerte de impugnación en función de la supuesta inconstitucionalidad del proyecto”, aseguró el Procurador ante la atenta mirada de los senadores y del ingeniero Blumberg.
“Me da la sensación que es importante la especialidad de aquel que investiga”, dijo al tiempo que aclaró que “si fuéramos a un sistema acusatorio, como parece haber suficiente consenso, los jueces no tendrían por qué tener especialidad alguna: bastaría con que se limiten a resolver el conflicto”.
“La especialidad tiene más sentido en el caso de jueces de instrucción que deben investigar y puedo admitir que es distinta la especialidad que requiere un delito patrimonial que un delito sexual, pero en este campo hay en la Capital Federal un fuero específico que es el Penal Económico”, agregó.
“Por lo tanto, se puede estar de acuerdo con al unificación de fueros o no, pero el argumento que predica que esto podría ser declarado inconstitucional no nos parece correcto” concluyó Righi.
Cabe recordar que a horas de haber asumido, Rosatti había manifestado sobre el proyecto de unificación de la justicia penal de la Capital que “primero tiene que sortear un test de constitucionalidad. Si los tribunales lo van a declarar inconstitucional, de nada servirá ese proceso”. Aunque luego aclaró, en un reportaje concedido a un diario nacional, que “el proyecto fue mandado porque el Gobierno considera que es útil, y yo suscribo esto. La pluralidad, la no concentración, son importantes”.
La iniciativa, en su momento, fue muy cuestionada por distintos especialistas. A esto se sumaron los propios integrantes del fuero federal, fiscales, jueces y camaristas, que iniciaron una resistencia activa al proyecto que pretendía integrarlos en un “megafuero penal” compuesto por 82 juzgados.