A esta conclusión llegó el juez español Baltazar Garzón quetrascendieron hoy en varias cancillerías Latinoamericanas. Sinembargo, Garzón no ha formalizado ningún pedido deinvestigación vinculado a esta causa al juez federal argentino,Claudio Bonadío que investiga la existencia de la "CoordinadoraCóndor" en nuestro país. Bonadío piensa viajar a Brasil lasemana próxima para reunirse con investigadores de ese país.Precisamente, quien reveló las conclusiones del juez españolfue el diario "O Globo" en base a declaraciones del abogadoparaguayo Martín Almada.
Tampoco la jueza María Servini de Cubría ha recibido ningúnpedido de Garzón o de otros países como Francia e Italia, dondeexisten tribunales que investigan las violaciones de losDerechos Humanos cometidas en los países sudamericanos durantela década de los 70. Servini considera que el crimen del exjefe del Ejército de Chile, Carlos Prats fuecometido por esa asociación de servicios secretos de losgobiernos militares en la región. En esa causa está preso y ala espera del juicio, el militante derechista chilena, EnriqueArancibia Clavel. Prófugo se encuentra el argentino Néstor SigaCorrea, otro elemento de la derecha argentina vinculado a laex SIDE del Proceso.
Sobre la participación de Ecuador y la continuidad de la"Operación Cóndor", Almada dice tener correspondencia de unoficial del Ejército de ese país dirigida a otro de Paraguayen la que expone "la situación subversiva registrada en elprimer trimestre de 1997". Almada dice temer a los militaresbrasileños y afirma que, si la diplomacia de Brasil legarantiza su integridad física, viajará a Brasilia a exponerlo que conoce al respecto. Las revelaciones de "O Globo" seproducen el mismo día en que el titular de la Abogacía delEstado, Gilmar Mendes, confirmó que ha enviado al ministrobrasileño de Defensa, Geraldo Quintao, una solicitud para quesean buscadas informaciones sobre la "Operación Cóndor" en losarchivos de los recientemente desaparecidos ministerios delEjército, la Marina y la Aeronáutica.
Hasta el lunes, el Gobierno tan sólo había ordenado que serevisasen los archivos del extinto Servicio Nacional deInformaciones (SNI) y de la Policía Federal para aclarar laparticipación brasileña en la llamada "Operación Cóndor". El ex general de ejército Newton Cruz, quien fue el jefe delSNI de Brasil en los períodos 1974-76 y luego 1978-83, declaróla víspera que la investigación sobre la participaciónbrasileña en la "Operación Cóndor" fracasaría sin la revisiónde los archivos del Ejército, la Marina y la Aeronáutica de supaís.
"Por qué sólo los agentes de información son sospechosos? ¿Porqué la culpa de todo tiene que ser del SNI? ", se preguntó Cruzy sugirió al Gobierno la revisión de los archivos de losministerios militares, que el año pasado fueron reemplazadospor el Ministerio de Defensa. La petición de Cruz fueinmediatamente atendida por la Abogacía del Estado, que ya lanotificó al Ministerio de Defensa. Aunque ha recalcado quenunca tuvo conocimiento de la "Operación Cóndor", Cruz sostuvoque "lo que pudo haber ocurrido es que militares (...) de losestados mayores de los ejércitos suramericanos acordaranoperaciones".
La participación brasileña en la "Operación Cóndor" está siendoinvestigada a solicitud de la justicia argentina.
Paralelamente, el Congreso creó una comisión para investigardenuncias según las cuales el ex presidente brasileño JoaoGoulart (1961-64), quien murió en Argentina en 1976 por causade un supuesto infarto cardíaco, fue víctima de la "OperaciónCóndor".