La Corte Interamericana de Derechos Humanos comenzó a sesionar este lunes en la Sala de Audiencias de la Corte Suprema, ubicada en la planta baja del Palacio de Justicia. El caso tratado en la primera jornada (Claude Reyes y otros vs. Chile) se inició en 2005 mediante una demanda efectuada por la Comisión Interamericana contra el estado chileno. Para el martes y el miércoles quedaron pendientes los casos “Montero Aranguren y otros vs. Venezuela” y “Baldeón García vs. Perú”.
La primera jornada comenzó con la
firma de un convenio con sus colegas argentinos de la Corte Suprema para "fortalecer sus relaciones y difundir los instrumentos internacionales para la promoción y defensa de los derechos humanos”. De la ceremonia participaron los siete integrantes de la CIDH, Enrique Petracchi, Elena Highton de Nolasco, Carmen Argibay, Juan Carlos Maqueda y Eugenio Raúl Zaffaroni.
En los ocho incisos del artículo segundo del convenio se establecen los objetivos del convenio, entre los que se mencionan la realización de congresos, seminarios, coloquios, conferencias y foros multilaterales para alcanzar "los fines propuestos por ambas partes" consistentes en el afianzamiento de los derechos humanos.
Luego, los jueces de la CIDH se avocaron a escuchar, en audiencia pública, las declaraciones de dos testigos, los dictámenes de tres peritos propuestos por la misma Comisión Interamericana, al representante del estado chileno y al abogado de las presuntas víctimas. Más tarde llegó el turno de los alegatos finales.
La demanda se relaciona con los hechos supuestamente ocurridos entre mayo y julio de 1998, cuando hubo una supuesta negativa del Chile de brindar a los señores Marcel Calude Reyes, Sebastián Cox Urrejola y Arturo Longton Guerrero toda la información que requerían del Comité de Inversiones Extranjeras en relación con la empresa forestal Trillium y el Proyecto Río Condor, sin que el Estado “argumentara una justificación válida de acuerdo con la legislación chilena”.
La Comisión Interamericana solicitó que la Corte declare que el Estado de ese país es responsable por la violación de los derechos consagrados en los artículos 13, 25, 1.1 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos en perjuicio de las tres personas mencionadas. Su abogado, por otra parte, apoyó ese pedido y solicitó además que se ordene al estado chileno que adopte medidas de reparación y reintegre las costas y gastos.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos -una institución autónoma de la Organización de Estados Americanos- fue establecida en 1979 y su objetivo es la
aplicación e interpretación de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y otros tratados concernientes al mismo asunto. Está formada por juristas de las más alta autoridad moral y reconocida competencia en DD.HH. Su jurisprudencia fue utilizada como fundamento de importantes fallos de la Corte argentina, como la declaración de inconstitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.
Para este período de sesiones en nuestro país la Corte está presidida por Sergio García Ramírez (México) e integrada por Alirio Abreu Burelli (Venezuela), como vicepresidente; junto a Oliver Jackman (Barbados), Antonio Carcado Tridante (Brasil), Cecilia Medina Quiroga (Chile), María Ventura Robles (Costa Rica) y Diego Garcia Sayán (Perú).
Toga y otros formalismos "Señoras y Señores, la Corte" anuncia la secretaria del tribunal para que los presentes "se pongan de pie", tras lo cual recién están autorizados a sentarse "una vez que lo hayan hecho los señores jueces", advierte el "reglamento para las audiencias públicas".
Luego ingresan a la sala los abogados que ejercen la calidad de defensores y los siete magistrados que integran la Corte Interamericana, que tienen cada uno un lugar predeterminado. Todos lucen las clásicas togas negras que se ven en la películas americanas.
Antes de cada interrupción, la secretaria advierte al público que "la Corte se retira", ocasión en la que los presentes deberán ponerse nuevamente de pie para que los jueces abandonen el recinto. Durante las deliberaciones, los asistentes "deberán guardar estricto silencio”, reza el reglamento.
Duhalde estuvo presente
El secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, destacó este lunes la importancia que tiene la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la actitud de deliberar en nuestro país. "Estas sesiones fuera de la sede de Costa Rica tienen que ver con la idea de la Corte tendiente a tener una mayor presencia y divulgación en sus países miembros, en una actitud más integradora", dijo el funcionario.
Duhalde también se refirió a la candidatura de Leonardo Franco, actual subsecretario de Política Latinoamericana de la Cancillería, para integrar la CIDH y, en este sentido, destacó la "brillante trayectoria" del jurista argentino.
Seminario de Derechos Humanos
Este lunes comenzó un seminario sobre seguridad y derechos humanos al que asistirán funcionarios y expertos nacionales e internacionales, entre ellos el juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni y el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián. El evento concluye el próximo miércoles.
La conferencia inaugural estuvo a cargo del juez venezolano Alirio Abreu, vicepresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Luego expuso el Defensor del Pueblo de la Nación, Eduardo Mondino, y el Director Ejecutivo del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH), Roberto Cuellar.
Para este martes está prevista la conferencia "magistral" del juez Eugenio Zaffaroni, quien se referirá a las 18:00 hs. a la "Responsabilidad Internacional del Estado y las obligaciones derivadas de los instrumentos internacionales de derechos humanos".
El miércoles tendrá la palabra el ministro León Arslanián, quien hablará a las 18:00 hs. sobre "la participación comunitaria y de la sociedad civil en la seguridad", así como también se referirá a "la prevención social y/o comunitaria de la violencia".
dju / dju
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