El Senado de la Nación aprobó este miércoles un proyecto de ley que incorpora la figura del acoso sexual al Código Penal. La norma prevé una
pena de 4 meses a 4 años de prisión para el que “abusando de una relación de superioridad jerárquica, laboral, docente o de índole similar, efectuare un requerimiento de carácter sexual, para sí o para un tercero, bajo la amenaza de causar a la víctima, en caso de no acceder, un daño en el ámbito de esa relación”.
El proyecto, que todavía debe ser ratificado por la Cámara de Diputados, fue elaborado por el ex ministro de la Corte Suprema Gustavo Bossert y el ex ministro de Justicia Ricardo Gil Lavedra. No obstante, la iniciativa llegó al Congreso el año pasado de la mano de la ex senadora y actual diputada Diana Conti, y con el acompañamiento de varios legisladores de distintas fuerzas políticas.
Sobre 47 senadores presentes en la sesión de este miércoles, 46 votaron a favor y sólo uno se opuso: la peronista formoseña Adriana Bortolozzi. En la votación en particular se repitió el mismo resultado al votar el artículo primero y el segundo, en tanto que en el tercero, al haberse sumado un nuevo legislador, fue de 47 a 1.
En su discurso, la presidenta de la Comisión de Justicia y Asuntos Penales, Vilma Ibarra, recordó que la iniciativa apunta a morigerar las "relaciones desiguales de poder" en la sociedad. También explicó que se bajó un año la carga punitiva para ponerla a tono con la figura de la
coacción agravada, que también se castiga con penas de cuatro meses a cuatro años. Esto había sido parte de la discusión en el seno de la Comisión cuando los senadores recibieron la visita del secretario de Política Criminal de la Nación, Alejandro Slokar.
En aquella ocasión, el funcionario cuestionó el máximo de la pena previsto en el proyecto original (5 años) y contó la experiencia de otros países como España, Brasil y Portugal, donde
la pena máxima no supera los 2 años de prisión.
Ibarra también contó que ya
existían muchos proyectos similares en el Congreso, que incorporaban la figura del acoso sexual en el ámbito penal. “Hemos encontrado proyectos del diputado con mandato cumplido Juan Pablo Cafiero; del actual diputado Cigogna; del senador con mandato cumplido Antonio Cafiero; de la diputada Graciela Camaño; de la senadora con mandato cumplido Graciela Fernández Meijide; del actual senador Carlos Menem, quien cuando ejerciera la Presidencia elevó un proyecto para incorporar el tipo penal del acoso sexual al Código Penal; y del diputado con mandato cumplido Jorge Folloni”, recordó.
Asimismo, destacó que
“queda mucho por hacer” y que “la batalla cultural es enorme” y subrayó que las mujeres “son las mayores víctimas de este tipo de delitos”. “No estamos penalizando intentos de seducción y ni siquiera el ámbito hostil que a veces se genera, porque entendemos que tiene que encontrar salidas de otra índole en el ámbito laboral, sino que estamos penalizando específicamente la amenaza coactiva y real ante una relación desigual de poder”, agregó.
Por último, la senadora Ibarra explicó que se va a considerar al delito como
de acción privada. “Si la víctima siente expuesto su pudor, su propia vergüenza y no quiere someterse a la situación de la investigación, no corresponde que el Estado genere la acción por sí mismo”, dijo.
En tanto, el radical Luis Petcoff Naidenoff recordó que el acoso “es una figura que encuentra tipificación allá por 1970 en los Estados Unidos, y que lógicamente también se propagó a Europa” y consideró que se “llenó un vacío” al incorporar el delito al CP.
Según un informe de la OIT, del 1996, la Argentina es uno de los países que registran
la tasa más alta de acoso sexual en el mundo, junto a Francia, Inglaterra, Canadá y Rumania.
dju / dju
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