28 de Junio de 2024
Edición 6995 ISSN 1667-8486
Próxima Actualización: 01/07/2024

"Hay que dar una discusión de índole interdisciplinaria, y a veces a algunos les cuesta entender, no se prueba con el sistema tradicional del derecho penal"

Julio César Castro
Director de la Unidad de Delitos Sexuales de la Procuración General de la Nación
Fiscal general ante los Tribunales Orales Penales de la Capital Federal.

 
Uno de los funcionarios judiciales con más experiencia en la investigación de delitos sexuales, que intervino en numerosos juicios de esa índole y lo hará en el que el reconocido psicólogo Jorge Corsi será juzgado como acusado de liderar una presunta red de pedofilia. El fiscal Julio César Castro, quien dirige la Unidad de Delitos Sexuales de la Procuración General de la Nación, habló con Diariojudicial.com de cómo actúa un abusador, y cuáles son las herramientas que harían falta para lograr su recuperación: tratamientos en su lugar de detención y seguimiento posterior para tener un control y reducir la reincidencia, entre otras. Por otra parte, se refirió a la “disyuntiva” que tienen los jueces a la hora de decidir sobre una excarcelación a favor de un abusador, aunque manifestó su desacuerdo a que esas personas son irrecuperables. Además, admitió que muchos de los jueces y fiscales no tienen un conocimiento acabado a la hora de intervenir en una causa por delitos sexuales, y que se necesita una “discusión de índole interdisciplinaria”. También opinó sobre el papel que juegan los medios de comunicación, y la sociedad.

¿Qué estadísticas manejan en cuanto al incremento de denuncias de delitos sexuales?

Incrementos hubo. El punto es que ya la proyección de éste semestre es mayor al del año pasado, con lo cual es claro que ha aumentado, lo que no significa que se han incrementado la cantidad de hechos sino de denuncias y de investigaciones. Algunas terminan con condenas y otras no. No hay que caer en que cualquiera que denuncia de por sí es un hecho, sino que hay que verificarlas. En conclusión, hay más en cuanto a número, pero denuncias no hechos.

¿Esto tiene que ver con un cambio de conducta en quienes son víctimas de este tipo de hechos, es decir en animarse a denunciarlos?

Claro. También que ha habido muchísima discusión y repercusión pública. A eso se suma el apoyo de las distintas ONG´s, que protegen a las víctimas y difunden más.

Se ha instalado el debate respecto a que si un violador es recuperable o no ¿cuál es su postura?

Yo creo que sí, hay que analizar la patología de cada persona, sobretodo si la tiene. Yo no me animaría decir como si esto fuera una ciencia exacta, me extraña de los médicos cuando algunos salen a decir que son irrecuperables, si me dicen eso entonces tenemos que discutir la inimputabilidad porque si una persona tiene autodeterminación absoluta y padece de un condicionamiento tal, yo no podría imputarlo. Entonces, es incompatible que no son recuperables. Hay que ver cada caso, no es lo mismo un abusador intrafamiliar, un pedófilo, u otros más graves.

¿Dentro de los delitos sexuales, cuál es el más complicado para investigar?

La pedofilia es uno de los más complicados, porque el perfil particular de los pedófilos tiene siempre la tendencia a enmascarar su situación, son totalmente negadores y tiene un criterio de seducción muy particular respecto a los menores, y los chicos son abusados sin darse cuenta porque entran en un juego de confusión. Por ejemplo, los capta por internet y en los locales de comidas rápidas, y no hay que creer que los llevan a una pieza y los violan, sino que es un trabajo de largo plazo, le regalan cosas y lo tratan de sacar de su vínculo familiar.

¿Es difícil que los padres del menor abusado se den cuenta?

En algunos casos resulta difícil, porque es complejo. Hay otra problemática, muchas veces los padres pierden de vista que su hijo está en peligro porque está en la computadora, y no en la calle. Pero muchas veces está chateando con un abusador, y después el pibe tiene encuentros con el abusador. El abusador logra ubicar grupos vulnerables donde el cuidado de los padres no está tan presente. En la mayoría de las causas, los pibes están en grupos de riesgo, o con problemas de familia. Estamos hablando de chicos, en su mayoría de un rango etéreo de entre 11 y 15 años. Hay grupos ya reconocidos de pedófilos que están en la red, en las web, internacionales, que intercambian material y propician lo que ellos llaman el amor libre…. absurdo.

¿Los violadores necesitan un lugar de detención especial?

En realidad no de derecho, sino de hecho porque no pueden convivir con la población carcelaria por los códigos internos de la cárcel. No pueden convivir con ellos porque rápidamente sufrirían las consecuencias de su accionar. Por otro lado, ellos no tienen problema de relación interpersonal dentro de la unidad, es más, tienen la mejor conducta y calificación, por eso acceden más fácilmente a salidas transitorias………..

¿Y en relación al tipo de tratamiento que deben hacer?

El punto es que no se está dando tratamiento. Hay una serie de complicaciones de índole legal, porque por ejemplo no es posible imponerle como una sanción un tratamiento, porque no está previsto en la Ley y además cómo se somete a un tratamiento a alguien que no lo quiere hacer. Si uno lograra con una modificación legislativa establecer dentro de la respuesta del Estado para estos casos la posibilidad de un tratamiento yo no vería ningún inconveniente si fuera voluntario.

¿Pero es correcto afirmar que en su mayoría, reinciden?

Si, pero también rescinden los ladrones, los estafadores, etc. El impacto social y cultural que tiene la violación es mucho mayor, está claro. Y además porque se reconoce, con esta idea equivocada, de que son enfermos. De que uno va a encontrar un abusador o un violador en un baldío en una calle descampada y oscura, no es así. Lo va a encontrar en las universidades, en el Poder Judicial, en la empresa, en el supermercado, están entre nosotros.

¿Los jueces a la hora de conceder una excarcelación a una persona condenada por un delito sexual deben ser más rígidos?

El problema es que como cumplen el reglamento carcelario, tienen buena conducta y no hay impedimento porque no se lo ha obligado a un tratamiento psicológico, ni tampoco el servicio penitenciario tiene un gabinete especializado para establecer un perfil de un análisis paulatino. Habría que hacer un seguimiento de la evolución, y así uno puede tener en cuenta un elemento más. Porque uno no puedo pedir el juicio político para un juez que dejó en libertad a una persona y luego cometió un delito, porque no lo pide la defensa porque legalmente les corresponde. Los jueces están en una disyuntiva.

¿Está diciendo entonces que se necesita un cambio de la ley de excarcelaciones, y también la inclusión de un tratamiento para éstas personas?

Sí. Tratamiento durante el cumplimiento de la pena y seguimiento posterior en relación con su actividad.

¿No se hace actualmente el seguimiento posterior?

De ninguna manera, el encargado sería el Patronato de Liberados. La finalidad sería establecer un control, pero no hablo de la Ley Megan, no de poner un cartel en la puerta de la vivienda de aquellos que han tenido causas por delitos sexuales, no sería una sociedad civilizada y además se los segregaría. Entonces lo mandamos a donde ¿a un gueto, a un barrio privado?, imaginemos si un consorcio se entera que tiene un violador en el edificio, nadie lo quiere, entonces ¿donde va?. Entonces si nosotros tenemos un tratamiento dentro de la cárcel, y un seguimiento posterior con un control, me animaría a decir que tenemos muchas perspectivas de bajar sensiblemente el índice de reincidencia. Pero, no tenemos los medios para hacer un seguimiento, y necesitamos una decisión política, y hacer un seguimiento por un patronato de liberados específico.

¿Usted cree que los jueces y fiscales en general tienen un basto conocimiento de los delitos sexuales, del perfil de un violador?

En algunos sí otros no. La nueva generación de jueces, lo que se han incorporado en los últimos cinco o seis años, tiene una apertura diferente porque tiene una escuela de formación distinta. Hay que dar una discusión de índole interdisciplinaria, y a veces a algunos les cuesta entender, no se prueba con el sistema tradicional del derecho penal, sino que hay que conocer de psicología evolutiva, psicología testimonio, y aceptar a otras disciplinas como un aporte de interés. En éstos casos es de difícil prueba porque no hay testigos, entonces ¿renunciamos definitivamente a esto?. Yo le podría decir todo es difícil de probar, pero hay que buscar alternativas.

Hace semanas atrás un abogado querellante pidió en un juicio oral la castración química para una persona acusada de violación, ¿qué le parece?

Pierde de vista los principios del derecho penal, entre ellos las garantías y los derechos humanos. Esto que implicaría una medicación forzada al sujeto no me pueden decir las consecuencias que puede traer, si no requiere estudio particular de su fisonomía y además sin formulación legal, ¿cómo se puede pedir semejante cosa?. Es tan disparatado como la pena de muerte, ¿quien me dice que esa personas es irrecuperable?.

¿En algunos países del mundo se aplica?

En Estados Unidos, en algunos estados sí. De todas maneras, la problemática está dada por el sistema normativo que tiene un país.

¿Los proyectos para crear un registro de ADN es una herramienta más?

A mi me interesa mucho el banco de ADN (actualmente funcionando). Todo lo que sirva para avanzar en la investigación estoy de acuerdo pero el banco de ADN se realiza a partir de los casos acreditados y de las muestras extraídas de las víctimas, ahí podría servir. El último caso de un violador serial de nueve hechos, que lo condenaron a 30 años de prisión, logramos ubicarlo, porque atacaba en distintas jurisdicciones, es decir, con el ADN logramos encontrar al sujeto.

¿Qué papel juegan los medios de comunicación?

Según. Bueno en la mayoría de los casos porque difunden estos hechos y han motivado a que la gente se anime a denunciarlos, y a veces malo porque se demoniza a algunas personas y no tienen la suficiente cantidad de prueba. Y ese rótulo es muy difícil, porque después no se desmiente.

¿Antes existían casos como el del llamado “Chacal de Mendoza” donde el padre sometía a abusos sexuales y vejámenes a alguien de su familia por tantos años?

Casos de chicas embarazadas de sus padres muchísimos, sí tenemos casos de abuso pero no con la gravedad y la prolongación en el tiempo como éstos. Pero sí casos de abuso por dos o tres años y aparecen chicas con embarazos de sus padres, abuelos o tíos.



sergio farella / dju
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