Según el proyecto, en caso de aprobarse será “el Directorio de la APROSS” quien “fijará los requisitos de acreditación necesarios que deberán reunir los prestadores especializados para su contratación”.
En sus fundamentos, el legislador remarcó que la finalidad es "alcanzar para la población el nivel más elevado de salud sexual y procreación responsable con el fin de que pueda adoptar decisiones libres de discriminación, coacciones o violencia”.
“El objetivo es poder responder, a través de la obra social de los dependientes del Estado Provincial, a una creciente necesidad y demanda de la sociedad como es la fertilización asistida”, agregó.
Además, según datos recopilados por el legislador en su proyecto, la esterilidad es una enfermedad “que afecta entre el 15 al 20 por ciento de las parejas en edad reproductiva, lo que equivale a decir que una de cada cinco parejas tiene problemas para lograr el embarazo”.
A éste proyecto, se le suma otro del mismo tenor presentado meses atrás por el diputado provincial Roberto Birri, el cual fue invocado por la presente iniciativa.
Así, la propuesta intenta reglamentar los tratamientos de este tipo, los cuales en muchas veces la Justicia tuvo que intervenir obligando a obras sociales a dar coberturas que se niegan a otorgar.