El cónclave, que se podría dar en La Moncloa, fue impulsado por la multitudinaria marcha que tuvo lugar este sábado en Barcelona en protesta por la sentencia del Máximo Tribunal español sobre la autonomía de la región. El fallo consideró que carecía de “eficacia jurídica” el término “nación catalana”, tal como aparece en el texto del preámbulo del Estatuto de Cataluña.
Entre un millón y un millón y medio de personas (la diferencia surge de las cifras aportadas por la policía y por los organizadores) protestaron en las calles de Barcelona contra el fallo que el 9 de julio ratificó que la Constitución sancionada en 1978, a la que Cataluña (que es una comunidad autónoma) se encuentra sujeta, “no conoce otra nación que la española”.
El preámbulo del Estatuto de Cataluña fue aprobado, con el 74 por ciento de los votos, mediante un referéndum convocado en 2006. En ese momento, el opositor Partido Popular (PP), encabezado por Mariano Rajoy, objetó ese texto ante la Justicia, que se tomó 4 años para emitir el fallo.
En dos fallos (el primero emitido el 28 de junio y el segundo el 9 de julio último), el tribunal aceptó algunas de las objeciones planteadas por el PP.
Si bien la manifestación del sábado fue organizada por Montilla para expresar su disconformidad con el fallo, también participaron grupos que están a favor de que Cataluña sea independiente de España.
Antes de la marcha, Montilla dijo que “el fallo no va a ayudar a resolver el problema catalán, sino que ha creado un nuevo” y postuló que “la sentencia atenta contra la dignidad de los catalanes” porque “limita y modifica” las líneas fundamentales del referéndum aprobado cuatro años atrás.
Este lunes, al anunciar el encuentro con Rodríguez Zapatero, Montilla aseguró que “el mal llamado problema catalán es también un problema de España y de todas las fuerzas políticas”.
Este miércoles y jueves, el Congreso español debatirá sobre el “estado de la nación” y todo indica que el fallo del Tribunal Constitucional sobre Cataluña será uno de los puntos de debate. También se discutirá la entrada en vigencia de la ley de aborto –impugnada por el PP ante la justicia- y la crisis económica que atraviesa la nación ibérica.