La comisión de Disciplina y Acusación del Consejo de la Magistratura aprobó este jueves, por unanimidad, el dictamen que habilita el comienzo de un juicio político contra el camarista federal de Mendoza, Luis Miret. “La Justicia no puede venir de los represores”, le dijo a los consejeros Ángela Urondo, hija del recordado poeta y periodista asesinado por la dictadura. Esa causa es investigada por la Cámara a la que pertenece Miret.
La Comisión de Disciplina y Acusación del Consejo aprobó por unanimidad el dictamen que habilita el comienzo del Jury contra el camarista federal de Mendoza, Luis Miret. El dictamen será tratado en el próximo plenario y allí se decidirá el comienzo o no del juicio político por “mal desempeño en sus funciones” contra el magistrado.
La reunión se inicio con el testimonio de estudiantes de la Universidad de Cuyo que se presentaron ante los consejeros para dar cuenta de la situación que ellos viven en relación con Miret. Héctor Cuello fue quien tomó primero la palabra, y dio detalles sobre la “prédica justificatoria de la dictadura” que el magistrado realizaba en sus clases en la institución.
Esto conllevo el inicio de reclamos por la Comisión de Estudiantes por los Derechos Humanos y la Ética, y por el Observatorio de Derechos Humanos de Mendoza (de la que Cuello forma parte) que derivaron en la rescisión del contrato el camarista con la Universidad. Asimismo denunciaron “aprietes” del camarista a los estudiantes “por los reclamos que iniciamos por vías institucionales”. “Pidió listas con los nombres de quienes estábamos reclamando”, agregó.
Una vez conocida esa resolución, Miret presentó un amparo contra la Universidad para solicitar su reincorporación que fue resuelto favorablemente por el conjuez Luis Santamaría. En sus clases, explica Cuello, “descalifica a las victimas del terrorismo de estado” y “dice que no sabía que estaba mal entregar bebes”. Y concluye que Miret utiliza “jerga propia de un represor y no de un juez federal de la nación”.
Luego vino un testimonio más corto, pero mucho más contundente. Ángela Urondo, hija del recordado poeta y periodista Francisco “Paco” Urondo, explicó el “desamparo” que siente por parte de la Justicia mendocina. “La misma cámara es la que lleva la causa por el asesinato de mi padre” dijo, y agregó la preocupación por esta “contradicción”.
“La Justicia no puede venir de los represores” dijo visiblemente emocionada. “He masticado impunidad toda mi vida” añadió. “Me siento muy sola” culminó, dejando con ello la decisión en manos de los consejeros.
Los consejeros se solidarizaron con estos dichos. Héctor Masquelet, pidió disculpas por la lentitud del proceso. “Los procesos son lentos porque garantizamos el derecho a defensa de quien en su momento no lo garantizó”, dijo. “Mendoza ha ocultado durante muchos años estas cosas”, añadió Ernesto Sanz.
Finalmente, Diana Conti, Luis María Bunge Campos, Luis María Cabral, Nicolás Fernández, Ernesto Sanz, Héctor Masquelet, Mariano Candioti, Santiago Montaña y Carlos Kunkel aprobaron y giraron el dictamen al Plenario. Asimismo la comisión propuso que Masquelet y Conti sean los miembros acusadores en el juicio político que se celebrará contra Miret en caso de que el plenario apruebe la acusación.
Cabe recordar que el camarista está acusado de haber, al menos, tolerado la aplicación de torturas a detenidos políticos en meses previos al golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 (y después de esa fecha también).