En la última reunión de la Comisión de Selección del Consejo de la Magistratura se planteó un debate sobre la pertinencia o no de tomar la prueba oral en los concursos. Para algunos, los dilata; para otros, permite saber de los magistrados más allá de su conocimiento.
En la reunión semanal de la Comisión de Selección del Consejo de la Magistratura se plantearon algunos de los inconvenientes con los que se encuentra la nueva composición del cuerpo y que atañen al proceso de los concursos.
Hernán Ordiales, consejero representante del Poder Ejecutivo, planteó la problemática sobre la falta de jurados para esta instancia. “La cantidad de jurados es muy escasa, sobre todo entre los magistrados” dijo y agregó que en la nómina actual hay anotados sólo 54 magistrados para realizar esta tarea.
Manuel Urriza, consejero académico y titular de la comisión, coincidió al respecto en que “una de las grandes dificultades es la conformación de jurados” y esbozó la posibilidad de “revisar las retribuciones que reciben los jurados para estimular un poco la participación”. Por su parte, uno de los representantes de los jueces, Ricardo Recondo, agregó la posibilidad de que “los jueces jubilados” sean nombrados para ese rol.
Es por ello que Ordiales finalmente propuso que se incluya en el próximo plenario el tratamiento de la modificación del artículo 1 del Reglamento de Concursos y así poder incorporar mayor cantidad de jurados, habilitando, por ejemplo, a las cámaras a armar listas de candidatos oa exceptuar la inscripción en el Registro Nacional de Jurados “si su experiencia lo acredita”.
Otra cuestión que fue traída a la mesa fue el debate en torno a la prueba oral establecida en el reglamento. Urriza explicó que “existen colegas que sostienen que dilata mucho los concursos”, aunque otros opinan lo contrario.
“Creo que el examen oral le servirá para evaluar otras condiciones de los postulantes”, sostuvo Recondo. A lo que Moreno anticipó: “Voy a poyar que se mantenga porque por lo menos uno se va con la idea de la personalidad que tiene el postulante”.
Además, durante la reunión se sortearon a los consejeros que se encargarán de evaluación provisoria de los antecedentes en varios concursos abiertos. Así, en el concurso 258, destinado a cubrir vacantes en los juzgados nacionales en lo Civil y Comercial Federal 1, 4, 5, 7 y 8 de Capital, salió sorteado Oscar Aguad; mientras que en el 259, para el cargo en el juzgado Federal de Eldorado, la sorteada fue Stella Maris Córdoba.
Por su parte, en el 260, que busca cubrir una vacante en la sala II de la Cámara Nacional en lo Civil y Comercial de la Capital, el sorteado fue Ricardo Recondo, quien actualmente integra la mencionada Cámara.
En tanto que Hernán Ordiales deberá realizar la evaluación de antecedentes en el concurso 261, juzgado Federal N° 3 de Córdoba; Mario Fera, en el concurso 264, para juzgados nacionales en lo Contencioso Administrativo números 5 y 8 de la Capital y Manuel Urriza en la vacante en la Cámara Federal de La Plata, concurso 265.