La Justicia porteña confirmó una medida cautelar que ordenó al Gobierno de la Ciudad otorgar una vacante a un nene cuya madre lo había inscripto pero no había obtenido una vacante. La Cámara en lo Contencioso, Administrativo y Tributario confirmó una sentencia de primera instancia.
La sala II de la Cámara en lo Contencioso Administrativo y Tributario (CAyT) de la Ciudad, con las firmas de Esteban Centanaro, Mabel Daniele y Fernando Juan Lima, confirmó una medida cautelar que ordenó al Ministerio de Educación porteño, otorgar una vacante en un jardín maternal a un nene.
Se trata de la causa “GNMF contra GCBA y otros sobre incidente de apelación” que se inició con la demanda de una madre que inscribió a su hijo en un jardín maternal a través del sistema de inscripción on line de la ciudad y cuya vacante no fue otorgada.
En primera instancia, Guillermo Scheibler dictó una medida cautelar y ordenó al gobierno porteño otorgar la vacante y “en caso de imposible cumplimiento, lleve a cabo las medidas pertinentes para asegurar tal vacante en alguna institución de todo el sistema educativo”.
La Cámara confirmó esta decisión y afirmaron que el Estado local tiene el deber de “garantizar, con los medios de que disponga, el derecho que la Constitución reconoce de establecer y financiar un sistema educativo a partir de los cuarenta y cinco días de vida”.
Tal y como lo consigna la constitución porteña “la Ciudad asume la responsabilidad indelegable de asegurar y financiar la educación pública, estatal laica y gratuita en todos los niveles y modalidades, a partir de los cuarenta y cinco días de vida hasta el nivel superior, con carácter obligatorio desde el preescolar hasta completar diez años de escolaridad, o el período mayor que la legislación determine”, explicaron los magistrados.
“Cuando en la Constitución se alude a que la instrucción es obligatoria desde los cinco años de edad, en un enfoque inicial del asunto, ese precepto parece estar consagrando un “derecho-deber” dirigido a su titular, esto es, el habitante”, afirman los magistrados.
De esta manera se confirmó la decisión de Scheibler que ordenó al Ministerio de Educación de la Ciudad a que otorgue la vacante al menor en un jardín maternal.