. Mihajlovic, nombrado la semana pasada como parte del nuevo gobierno reformista de Serbia, había prometido tomar la medida porque Milosevic está requerido por el tribunal de crímenes de guerra de la ONU y también está, dijo, sujeto de investigación por las autoridades judiciales locales.
Muchos líderes reformistas serbios y yugoslavos han dicho que Milosevic no debería ser transferido a la jurisdicción del tribunal de la ONU en La Haya, que lo ha encausado formalmente por crímenes de guerra, sugiriendo en cambio que debería ser enjuiciado en su país.
Los gobiernos de Occidente consideran a Milosevic como uno de los principales responsables por la violenta disolución de la antigua Yugoslavia durante la última década. Pero muchos serbios no comparten esa opinión y acusan al tribunal de la ONU de ejercer un sesgo antiserbio.
Algunos, sin embargo, han dicho que podría enjuiciársele en Yugoslavia bajo cargos de fraude electoral y corrupción.
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