Roberto Carlés será el quinto candidato a ocupar un lugar en la Corte Suprema que deba atravesar el camino que marca, desde 2003, el Decreto que reglamenta el artículo 99 inciso 4° de la Constitución.
Se suma a la lista que, en orden cronológico completan Raúl Zaffaroni, Elena Highton de Nolasco, Ricardo Lorenzetti y Carmen Argibay. Tiene un buen antecedente, todos los postulantes fueron finalmente designados en el Alto Cuerpo.
Fayt, Maqueda y Petracchi, fueron los últimos jueces cuya terna elevó directamente el Poder Ejecutivo al Senado, y fueron aprobados por los dos tercios de la Cámara Alta.
Zaffaroni
Zaffaroni, en 2003, en el marco de la salida del ex presidente de la Corte, Julio Nazareno, fue el primero que atravesó el proceso de selección. Su designación en la Corte fue la que generó mayores conflictos. Hubo ONG’s y personalidades académicas que realizaron un férrea oposición a que forme parte del Alto Tribunal.
Solicitadas en los diarios y en diversos medios de comunicación hicieron testimonio de ello. Su visión del derecho penal y su carácter de ‘garantista’ fueron el foco de las críticas, que hicieron hincapié en que el recientemente retirado magistrado no era apto para ejercer la magistratura de la Instancia Extraordinaria. 831 impugnaciones recibió el penalista, contra las 134 adhesiones que su candidatura detentó.
Como dice su Currículum, Zaffaroni es abogado y escribano. Fue Juez de Cámara y Procurador General de Justicia de San Luis. Luego, ya en la Capital Federal, Juez Nacional en lo Criminal y Correccional Federal, Juez en lo Criminal de Sentencia, para culminar siendo integrante de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal.
En otros ámbitos, fue Convencional Constituyente en 1994, para la reforma de la Constitución Nacional, y en 1996, para la reforma de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires. Fue también Diputado por la Ciudad de Buenos Aires entre 1997 y 2000.
El 6 de octubre de 2003 llegó su pliego al Senado. Ese día, luego de una maratónica audiencia pública que duró siete horas, se le informó a Zaffaroni que una semana después iba a ser llamado para informarle el despacho de la Comisión de Acuerdos de la Cámara Alta. El despacho tuvo resultado favorable para Zaffaroni, y el 20 de octubre de ese año, el ex presidente Néstor Kirchner lo designó mediante el Decreto 932/2003. El 31 de ese mismo mes, Carlos Fayt le tomó juramento.
Highton
Elena Highton de Nolasco tiene el privilegio de ser la primera jueza mujer que juró como integrante del Máximo Tribunal de Justicia, siendo designada en democracia. El 8 de marzo de 2004 se publicó en el Boletín Oficial su postulación.
Cuando llegó a la audiencia pública en el Senado, contaba con 18 impugnaciones y 7 adhesiones. Se la criticó por su posición respecto del aborto en un artículo académico, y por su actuación cuando fue camarista civil, cuando no hizo lugar al pedido de Marta Olgado de realizar un análisis de ADN en un proceso de filiación contra el ex presidente Juan Domingo Perón.
También abogada y escribana, cursó estudios en la Universidad de Nevada y en Harvard. Al igual que Zaffaroni y Argibay, tiene una vasta carrera judicial, que incluyó el ejercicio de la profesión de abogada, Defensora Oficial de Incapaces y Ausentes ante la Cámara Nacional de Apelaciones y Juzgados Nacionales de Primera Instancia Especial en lo Civil y Comercial, Juez Nacional de Primera Instancia Especial en lo Civil y Comercial, Juez Nacional de Primera Instancia en lo Civil, y Juez de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, cargo al que renunció para ser integrante de la Corte, designada por el Decreto 752/2004 del 17 de junio de 2004. Su jura fue a finales de ese mes, el día 28.
Lorenzetti
En noviembre de 2004, poco antes de presentarse en el Senado, Ricardo Lorenzetti cosechó casi 700 adhesiones, un centenar de ellas de organismos nacionales e internacionales. Sólo tuvo dos impugnaciones desde que, el 14 de octubre de 2004, el Ministerio de Justicia hizo pública su candidatura a ocupar un lugar en la Corte Suprema. El, en ese momento, el candidato a reemplazar a Adolfo Vázquez, contaba con prestigio como abogado y también como jurista, especializado en Derecho Civil.
Hasta su llegada al Máximo Tribunal, Lorenzetti ejerció la profesión, la docencia, fue conferencista y autor de numerosos libros. Es el único de los actuales integrantes de la Corte, nombrados durante la vigencia del Decreto 222/03, que no pasó por la función judicial hasta su jura como ministro del Alto Cuerpo.
El 12 de diciembre de 2004, Lorenzetti fue a defender su pliego en el Senado, salió airoso de la audiencia y el 21 de diciembre de 2004, su nombramiento se oficializó con la firma del Decreto N° 1878/2004. Un día después, Enrique Petracchi, en ese momento presidente del Alto Tribunal, le tomó juramento.
Argibay
El aviso oficial en el que el Ministerio de Justicia dio a conocer que Carmen Argibay era candidata a integrar la Corte Suprema se publicó en el Boletín Oficial del 18 de enero de 2004, aunque había sido propuesta el 30 de diciembre de 2003. Fue designada en junio de 2004, pero no juró hasta que culminó su tarea como integrante ad litem para el Tribunal Criminal Internacional que juzgó crímenes de guerra en la ex-Yugoslavia.
Por sus posturas, entre las que se destacó la de que se consideraba “atea militante” y por su visión en cuanto a la penalización del aborto, Argibay fue merecedora de 188 impugnaciones, principalmente, de ciudadanos particulares. Por su parte, contó con 6 adhesiones, principalmente de organismos.
La trayectoria de Argibay, quien falleció en mayo de 2014, estuvo marcada por tribunales, desde 1959 estuvo rodeada de expediente, cuando ingresó como empleada interina en el Juzgado Nacional en lo Correccional Letra ´N´ de Capital Federal. Luego de unos años en la Justicia renunció para ejercer la profesión de abogada, y luego pasar por diversas Secretarías en Juzgados de Instrucción, de Menores, y de la Cámara del Crimen.
Durante la dictadura fue secuestrada y liberada, tras ello volvió a ejercer la profesión y ya en democracia, fue Jueza en lo Criminal de Sentencia y luego Camarista. Posteriormente fue Jueza de Tribunal Oral hasta su jubilación en 2002. En junio de 2001 fue nombrada integrante del Tribunal Internacional. Fue además, miembro Fundadora de la Asociación Internacional de Mujeres Jueces (IAWJ.
En junio de 2004, el pliego de Argibay fue aprobado por el Senado, de esa forma, se convertía en la tercera integrante de la nueva camada de ministros de la Corte Suprema. El 31 de Enero de 2005 se publicó en el Boletín Oficial el Decreto 54/05, por el cual el ex presidente Néstor Kirchner la designaba como jueza de la Corte Suprema, cargo que asumió el 2 de febrero de ese año.