El juez Canicoba Corral tiene en su juzgado una de las causas por enriquecimiento ilícito y la semana pasada le rechazó a la ex funcionaria la posibilidad de que asuma su propia defensa. Una medida similar adoptó el juez Jorge Urso.
María Julia enarboló la decisión de asumir su propia defensa -descreída de la justicia, según dijo- tras la renuncia de su abogado defensor Oscar Ravinovich.
Golf, ¿pasión de multitudes?
El pedido de María Julia se conoció el mismo día en que quedó radicada en el juzgado en lo Criminal y Correccional Federal 6, a cargo de del ya nombrado Rodolfo Canicoba Corral, una denuncia contra ella, en su condición de ex secretaria de Recursos Humanos y Medio Ambiente, y contra el ex presidente Carlos Menem, por la presunta comisión del delito de defraudación a la administración pública nacional en el marco de la contratación de obras para dar agua corriente en forma “urgente” en una zona de la ciudad de La Rioja, trabajos que finalmente fueron destinados a un exclusivo club de golf en la capital de la provincia.
La presentación judicial fue realizada por el abogado Ricardo Monner Sans, que transcribió una resolución de la Secretaría de Medio Ambiente del 29 de junio de 1995, en la que Alsogaray adjudicó “la realización de un pozo de agua en la ciudad Capital de La Rioja a la empresa de Perforaciones Electromecánica López”.
El acto administrativo (artículo 7 de la ley de Procedimientos Administrativos) tenía por objeto “obtener el vital elemento y mejorar a través de ello la optimización de los recursos naturales de esa zona”, evitando el deterioro del medio ambiente “por las complicaciones de todo tipo que trae aparejada la falta de agua”.
La primer sospecha de irregularidades nace con la resolución 200 de 1995 –del 29 de junio-, en la que consta que las cotizaciones se solicitaron en esa zona del país y no en la Capital en razón de la distancia con La Rioja. Al día siguiente, la Dirección Técnica, Administrativa y Contable de la Secretaría que dependía de María Julia autorizó de manera directa la adquisición de “una bomba electromecánica sumergible”, que debía ser fabricada especialmente para “complementar los trabajos”.
Dos meses y medio después, a través de una disposición del 12 de septiembre, se contrató con Electro Tucumán SA la compra de materiales eléctricos que, según la información aportada por Monner Sans, habrían sido destinados a la cancha de golf del club del que es socio el ex presidente.
Además, según la presentación, el Golf Club está instalado dentro de un predio que el Congreso Nacional otorgó a la provincia de La Rioja que, a su vez, la transfirió a la Municipalidad de la Capital provincial.
“La bomba de agua electromecánica sumergible se encuentra ubicada en el campo de golf. El agua necesaria ´con urgencia´ abastece el susodicho campo de golf y no precisamente las necesidades populares de los riojanos que no juegan al golf”, dice Monner Sans con algo de ironía en el escrito que presentó hoy.
Sin embargo, más dinero público fue destinado a La Rioja para el riego del club de golf, por lo que se pagaron precios superiores a los inicialmente aprobados. El 22 de octubre de 1996, María Julia ordenó un pago adicional de 7280 pesos a Electromecánica López, con el mismo objeto de la primera resolución: los trabajos de perforación para el pozo de agua.
Según trascendidos que invoca el abogado, la división de Asuntos Jurídicos de la Secretaría había requerido una investigación para comprobar si habían existido irregularidades, aunque nunca se concretó.
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