Los cargos formulados por López del Carril motivaron la inmediata reacción de los directivos de las tabacaleras Massalín Particulares y Nobleza Picardo, que amenazaron con iniciar acciones legales contra el sucesor de Armando Gostanian.
López del Carril aseguró que " por cada cigarrillo legal hay tres ilegales", pero aclaró que no se trata de una comparación con los que entran de contrabando, sino porque las tabacaleras "no ponen las etiquetas que nosotros fabricamos".
Por esa razón el juez Aguinsky quien tiene a su cargo causas por contrabando de cigarrillos extranjeros y también por el reingreso al país de cigarrillos de industria nacional que habían sido exportados con la condición de no ser comercializados en el país, está interesado en conocer los motivos de la denuncia de López del Carril.
Una de las hipótesis que maneja el magistrado es la posibilidad que los cigarrillos exportados a muy bajo costo por no contar con el gravamen impositivo interno, puedan reingresar al país con estampillado falso.
Seguramente tendrá particular interés en conocer de boca del funcionario las razones por las cuales aseguró a una agencia oficial de noticias que se trata de "una evasión que tiene impacto en la Argentina y en los países de orígenes de las tabacaleras, porque en sus balances dicen pagar impuestos que no pagan".
Por su parte, el gerente general de la Casa de la Moneda, Jorge Cernadas, aclaró al diario El Cronista , que esa institución no es proveedora directa de estampillas a las tabacaleras, sino que las mismas son adquiridas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), y que en 1999 fueron impresas 2.700 millones, destinadas a los paquetes de cigarrillos.