Domínguez asoció de inmediato este nuevo acto intimidatorio con los sufridos por los jueces de instrucción porteños Alberto Baños y Wilma López y sentenció que obedecen a un accionar de tipo "mafioso".
Este nuevo hecho acrecienta la honda preocupación puesta de manifiesto por el gobierno y en los mas altos niveles de la Justicia, en tanto que al acto intimidatorio sufrido por el magistrado se suma otro hecho que reaviva métodos de otras épocas: el hijo de uno de sus custodios, de 15 años fue perseguido por un automóvil Ford Falcon, sin patentes, ocupado por desconocidos. Domínguez había recibido en las ultimas horas una misiva que decía "el año pasado te matamos a uno; y ahora te vamos a matar a otro".
El magistrado, en declaraciones periodísticas, estimó que la Justicia se encuentra "ante un claro mensaje mafioso".
El anónimo hacia alusión a lo que sucedió el 17 de marzo del año pasado, cuando asesinaron a mansalva a la subinspectora María Eugenia Alsogaray, que se encontraba de guardia en el interior de un auto junto al hijo del juez, en la puerta de la casa del magistrado, ubicada en Lomas de Zamora.
En este nuevo caso denunciado hoy, el hijo del suboficial de la policía bonaerense Julio Argentino Velázquez, encargado de la custodia de Domínguez, también fue amenazado y perseguido ayer por tres desconocidos cuando regresaba de hacer unos mandados que le había encomendado la madre.
Los desconocidos estaban a bordo de un Falcon sin chapa patente, y el joven huyó corriendo hasta refugiarse en su casa. A ellos se suma que en los últimos días el mismos automóvil habría sido visto en las inmediaciones del colegio donde el menor cursa sus estudios.
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