El magistrado investiga una denuncia que afirma que en varios espectáculos futbolísticos no se habían presentado la cantidad de efectivos que habían sido contratados. Según explicó Mathov a Diariojudicial.com, la policía adicional se encarga exclusivamente de la seguridad dentro del estadio. Además, fuentes del juzgado aseguraron que en los próximos días se presentarían también en calidad de testigos, los presidentes de doce clubes de fútbol.
En una audiencia que duró casi una hora y media, el secretario le describió al juez el funcionamiento de la seguridad deportiva al detalle. “Cada club decide cuántos efectivos deben concurrir a cada encuentro, pero es el Comité de Prevención de la Violencia en el Fútbol el que determina el riesgo de cada partido”.
La causa se inició luego de que en 1999 se pudo comprobar que durante un partido entre San Lorenzo y Huracán faltaban cien de los policías contratados. Mathov afirmó hoy que se trató de “un problema de notificación” y que no se le pagó a los efectivos que no trabajaron. Aclaró inclusive que como el club pagó por adelantado, esa suma fue devuelta.
Según afirmaron fuentes judiciales, hay al menos tres altos jefes policiales imputados en la causa. Consultado por este medio acerca de la existencia de algún sumario administrativo, Mathov explicó que “los sumarios internos están suspendidos, y así estarán hasta la decisión judicial”. El secretario de Seguridad Interior dijo que la Policía no podía investigar en forma paralela al juez.