Se trata de 1600 –sobre un total de 1735- presos alojados en Devoto, cerca de 300 en General Roca y solamente 19 en la ciudad de Neuquen. Según el subsecretario, que estuvo reunido en la noche de ayer con representantes de los presos ayunantes, “la huelga de hambre es absolutamente pacífica y así lo han anunciado ellos mismos”.
El reclamo que le hicieron al funcionario de la cartera de Justicia abarca una conmutación de penas y la agilización de las causas judiciales demoradas, aunque “el último es un tema que le escapa al Ministerio”, según advirtió Ruiz Moreno.
La petición de una reducción en las condenas no es más que un efecto dominó de la decisión que tomó el Poder Ejecutivo para resolver el conflicto con los presos de La Tablada, que tomaron una iniciativa similar que duró más de 110 días y que tuvo resonancia internacional.
Ruiz Moreno aclaró que al tomar la decisión de decretar la conmutación para los atacantes del Movimiento Todos por la Patria (MTP) eran concientes de que una situación como la actual podía generarse. Sin embargo, el subsecretario aclaró que “pretender una equiparación parece absurdo” e hizo hincapié en que “no existe ninguna instancia de negociación”.
El funcionario advirtió que los presos de La Tablada reclamaban una segunda instancia judicial respaldados por una recomendación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y que “en cambio los huelguistas actuales tuvieron su posibilidad de apelar o, en su caso, quienes están en proceso, la tendrán”. Además dijo que el hecho de que Enrique Gorriarán Merlo y su esposa, Ana María Sívori, hubiesen quedado afuera del beneficio por haber contado con una instancia ante la Cámara de Casación es una prueba de ello.
Ruiz Moreno explicó que el ministro de Justicia, Jorge De la Rúa, le ordenó que ente las medidas especiales ante esta protesta de los internos reforzara la seguridad “para evitar cualquier acto de violencia” y que monitoreara el estado de salud de quienes realizan el ayuno.
Una información que fue interpretada en el Ministerio de Justicia como una buena noticia fue que los infectados con el virus del HIV y otros enfermos, todos ellos en Devoto, decidieron no adherirse a la huelga de hambre.
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