La Comisión de Selección había aprobado un dictamen, también por unanimidad, proponiendo el siguiente orden de prelación de los aspirantes: Horacio Ernesto Barberis; María Inés Maiza; Pablo Jantus; Adrián Pérez Lance, y Nélida Susana Villamonte, esta última, jueza de menores de la localidad bonaerense de Lomas de Zamora. El debate se desató luego de que Villamonte se presentara en el plenario impugnando la evaluación de los jurados Carlos Wybert; Anibal Aguirre y Rodolfo Vigo, a raíz de que, según la magistrada, había quedado en quinto lugar, argumentando que el jurado le había bajado el puntaje pues, a su entender, tendría que haber quedado en segundo lugar.
En un momento del debate la diputada y consejera María Lelia Chaya, propuso que el dictamen vuelva a la Comisión de Selección para que se considere el lugar de Villamonte, pero el consejero Alfredo Vítolo señaló que ante la impugnación de cualquier concursante no se puede volver atrás el procedimiento porque eso traba el concurso. También en esa línea fundamentaron su criterio los letrados consejeros Juan Mario Gersenobitz, y Eduardo Orio .
La magistrada estuvo “floja en la entrevista personal” afirmó Gersenobitz, en tanto Orio señaló que “el jurado se puede haber equivocado” pero que, “sin quitar el derecho a defensa del postulante, hay que tener cuidado”, en referencia a que no va a haber terna para elevar al Poder Ejecutivo. Chaya, en tanto, sostuvo que la concursante fue notificada que había obtenido una calificación de 95 puntos, y que “luego se enteró que estaba en quinto lugar”.