La acción civil que tramita en el juzgado 95 a cargo de Carmen Ubiedo fue iniciada por Ricardo Manselle, propietario de un restaurant en la localidad de Martínez, quien durante el juicio oral y público en el que se intentó develar quiénes fueron los autores del asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas, afirmó que había visto en varias oportunidades a Gregorio Ríos junto a Alfredo Yabrán en su local, prueba que fue valorada en la sentencia en la que se condenó a Ríos.
Mientras se sustanciaba el debate en la ciudad bonaerense de Dolores, Manselle fue tentado con 60 mil dólares para cambiar su declaración. Presionado luego de varios intentos, el testigo se contactó con el Canal 9 de televisión y filmó el encuentro con el abogado Jorge Knoblovits, quien le ofrecía dinero nuevamente.
Tras la emisión de las escenas en la televisión en enero de 1998, el fiscal Félix Crous formuló la denuncia penal en contra de Knoblovits, que recayó en el juzgado de instrucción 41 a cargo de Daniel Turano, quien hacia fines de 1999 cerró la causa al dictar el sobreseimiento del letrado imputado.
Fue en este proceso que Caviglia representó a Manselle como querellante, y por el que el ex diputado fue acusado de incumplir sus responsabilidades profesionales al cometer “graves negligencias en el ejercicio profesional”. Por otro lado, el autor le imputa a Caviglia no haber apelado la resolución de a pesar de que mensualmente cobraba mil pesos en honorarios.
Según lo explicó Manselle a los periodistas acreditados en Tribunales, cuando tomó contacto con el expediente penal, pudo constatar que en ningún momento Caviglia se había presentado como su apoderado.