El jefe del Ministerio Público hizo estas apreciaciones en la Cámara de Diputados, al inaugurar las jornadas de análisis "A Tres Años de la Reforma Procesal Penal" organizadas por la Defensoría de Casación, cuyo titular es el Dr. Mario Coriolano.
El procurador también disparó contra quienes "señalaban que si la plata para el nuevo sistema se hubiera destinado a los jueces de instrucción hubiera sido más barato" e ironizó con que "pagar a un solo monarca es también más económico que tener una democracia".
De la Cruz admitió que "es lógico que tenga defectos el nuevo sistema" pero también remarcó como logros el que "a medida que pasaron los años es cada vez menor el plazo de requerimiento de elevación a juicio y mientras que antes de la reforma ese lapso era en promedio 700 días, en el 2001 uno se acortó a 150".
El Procurador también reclamó la provisión de mayor cantidad de cargos "para el sostenimiento del sistema" indicando que "el Ejecutivo debe decidir entre lo necesario y lo que puede esperar, y lo que realmente no puede esperar es la tarea de investigación del delito".