La denuncia fue radicada por Gonzalo Estevez Cambra ante la Cámara Federal y tras la realización del sorteo de rigor la misma fue elevada al juzgado federal 3, que se encuentra a cargo del juez federal Rodolfo Canicoba Corral desde la semana pasada cuando su par Gabriel Cavallo pasó a integrar la Sala Primera de la Alzada.
El denunciante dio cuenta de la existencia de "distintas maniobras tendientes a atemorizar" a los jueces de la Corte Suprema de Justicia y al procurador General de la Nación, Nicolás Becerra, en relación con la causa de la venta ilegal de armas.
Estévez Cambra sostuvo que los ministros de la Corte Julio Nazareno y Adolfo Vázquez fueron advertidos "en forma enmascarada" que debían apartarse de la causa por la venta de armas, ya que si no se excusaban de hacerlo "serían denunciados".
Carrió y Ocaña habían reclamado ante el Máximo Tribunal la excusación de Nazareno y Vázquez , invocando la presunta "amistad manifiesta" que ambos tendrían con el ex presidente Menem y su ex asesor presidencial Emir Yoma.
La denuncia por asociación ilícita alcanzó además al abogado denunciante de las armas, Ricardo Monner Sans, quien formuló una presentación similar a la de las legisladoras, pero que fue desestimada por el juez Claudio Bonadío.
Estevez Cambra dudó, sin embargo, en imputar los mismos cargos a los periodistas Daniel Santoro, del diario Clarín y Jorge Urien Berri, de La Nación, quienes siguen las alternativas de la causa, al sostener que quizás "fueron utilizados sin que ellos mismos lo supieran".
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