“Cuando empezamos con los cacerolazos, si juntábamos 100 personas estábamos hechos, reconozco que hoy no son tantos, pero igual es un número importante de asistentes”, sentenció Ramírez, al tiempo que opinó que con la cantidad personas que llegaron a las otras protestas se “mal acostumbraron”.
En declaraciones a Diariojudicial.com, Ramírez adelantó que el próximo miércoles a las 19.30, en la facultad de Ciencias Sociales, se llevará a cabo un reunión de la Junta Promotora para la Remoción de la Corte Suprema, y destacó que a la misma están invitadas todas las asambleas barriales que toman parte de los cacerolazos.
“Están invitados todos los que quieran tomar parte. Necesitamos que todos vengan”, recalcó el letrado y agregó que en el encuentro “no se bajará ninguna línea a las asambleas” sino que se les intentará explicar todos los pasos para llevar a cabo “la expulsión de todos los corruptos”.
“Los manifestantes luego del cacerolazo en tribunales nos vamos a tomar un café a la casa de Julio Nazareno y Enrique Petracchi, y una copita con Gustavo Bossert”, ironizó Ramírez, dando por sentado que iban a realizar escraches a los domicilios de algunos de los jueces.
De la protesta de hoy tomaron parte varias asambleas barriales. Entre ellas se destacó un grupo de Longchamps que se presentó con una marioneta, que representaba una oveja con una cacerola y un palo. “Queremos que se acelere el proceso de juicio contra la corte” indicó un integrante del grupo.