La denuncia contra el diplomático –quien en las últimas horas negó haber hecho manifestaciones en ese sentido a una emisora radial de Rosario—fue formulada por el abogado Ricardo Monner Sans quien pidió al juez federal Jorge Ballestero que investigue la responsabilidad del canciller Carlos Ruckauf como máximo superior jerárquico, y ante la posibilidad que los dichos de aquel hayan respondido a directivas impartidas por el titular del Palacio San Martín.
La presentación se basa en los dichos de Quinsland a una emisora de Rosario, durante un reportaje telefónico que le efectuó el periodista José Andrés López, cuando el diplomático se encontraba en Caracas.
Quinsland sostuvo en aquella ocasión –y cuando Chávez aún no había sido restituido en su cargo—que “el señor Carmona Estraga es muy amigo de la Argentina” (en alusión al presidente civil que habían designado los golpistas, a la vez que subrayó que la intentona “fue una decisión total, absoluta, conciente y muy valerosa de la civilidad venezolana. Digamos la recuperación de la democracia por la sociedad civil”.
Ante esa posición puesta de manifiesto por el cónsul, el denunciante se preguntó en su presentación si esas apreciaciones “fueron impulsadas por el ministro de Relaciones Exteriores” , y en ese orden pidió que se investigue profundamente tal situación “que hace crecer -de cara a la nueva estrategia de poder en Estados Unidos—lo que se creía archivado: el golpismo institucional como modo más apto de sujeción a los pueblos hambreados”.
Sin embargo, admitió la posibilidad que los dichos del diplomático no hayan respondido a la línea bajada por Ruckauf, pese a lo cual requirió que se establezca cuál fue la actitud adoptada en torno a la conducta de Quinsland.