Fuentes judiciales indicaron que el secretario de Estado –que también acompañó a Rodríguez Saá en su breve interinato- aseguró que “no sabía nada” sobre el supuesto complot, ante el juez Oyarbide y el fiscal de la causa, Carlos Stornelli.
Scioli también contestó sobre la fallida cumbre de Chapadmalal, tras la cual Rodríguez Saá decidió abandonar la primera magistratura. Sobre el tema, dijo que si bien no estuvo presente en el encuentro, sabía que "no se habían cumplido las expectativas del presidente”, por lo cual “ se veía venir la decisión que iba a tomar" el ex mandatario puntano, quien horas después renunció desde su provincia natal.
Scioli fue citado precisamente porque acompañó en su viaje a San Luis a Rodríguez Saá, y explicó que en el trayecto, "iba definiendo el discurso de renuncia junto a los gobernadores (de Formosa, Gildo) Insfrán y (de La Rioja, Ángel) Maza".
El secretario también negó que la manifestación de protesta que se realizó frente al Complejo Turístico de Chapadmalal durante la cumbre, hubiera sido para pedir la renuncia del presidente y explicó que fue "en forma pacífica y para reclamar la reapertura del lugar", además, aseguró que el corte de luz que se sufrió en la residencia presidencial “no fue un sabotaje”.
La declaración de Scioli se decidió luego del testimonio del secretario general de la Presidencia en tiempos de Rodríguez Saá, Luis Lusquiños.
Este ex funcionario aseguró que la renuncia de Rodríguez Saá “estuvo directamente relacionada con la presión de grupos económicos que querían devaluar y pesificar” aunque dijo desconocer la presunta existencia de un complot.
Las fuentes señalaron además que el último miércoles se presentó a declarar en la misma causa el ex jefe de la SIDE, Carlos Becerra. El “Señor 5” de De la Rúa estaba citado para el jueves próximo, pero apareció “sorpresivamente” y se le tomó declaración.
Becerra fue relevado del secreto que ampara a los agentes de inteligencia y aportó –remarcaron las fuentes- datos relacionados con la represión policial del 19 y 20 de diciembre en el centro porteño, en las últimas horas del gobierno de Fernando De la Rúa.