Para la abogada de Bernasconi, los que sí cometieron delito son los ex policías Daniel Diamante, Antonio Gerace y Carlos Gómez, juzgados y condenados en un proceso anterior. De ellos, dijo que trabajaban para el juzgado de Dolores pero "fuera de la ley".
La defensora insistió que “no puede decirse que Bernasconi haya participado de una banda, de una asociación ilícita” y aseguró que “todo lo que los policías sabían lo traían aprendido”.
En su carga contra los bonaerenses, la letrada dijo que los efectivos eran unos “patéticos Sérpicos” a quienes desde la Policía “les enseñaron que para combatir la droga vale todo”.
Bajo las órdenes de Bernasconi, estos policías encabezaron los operativos que culminaron con la detención del manager de Diego Maradona, Guillermo Cóppola, y del ex jugador de fútbol Alberto Tarantini.
En varios tramos de su largo alegato, la doctora León cuestionó sin ambages la “moralidad” de Cóppola y Tarantini, a quienes calificó de “personajes farandulescos”, y no de “ricos y famosos”, como se los menciona en los medios.
Además, la defensora de Bernasconi pidió que se extraiga testimonio para investigar por “falso testimonio agravado” a Guillermo Cópolla, quien sobre el final del alegato se hizo presente en tribunales para aclarar que, aunque sus abogados no alegaron, no desistió de la querella contra el ex juez que lo mantuvo detenido.
Sobre Tarantini, León dijo que “todos saben que era un informante, un buche de la Policía Federal” y “una persona que consume estupefacientes y no tiene sus capacidades morales en grado de excelencia”.
La abogada también desestimó la acusación fiscal sobre los siete hechos de falsedad ideológica en la confección de actas de interrogatorio. Al respecto, sostuvo que esas declaraciones fueron tomadas por el entonces secretario de Bernasconi, Roberto Schlagel, y que no se puede acusar al juez de las irregularidades.