Respecto del caso que está siendo investigado como “privación ilegal de la libertad” por el fiscal Carlos Gómez, el magistrado ventiló que el hecho se podría vincular con algunas de las causas que aún debe resolver, o que bien se podría tratar de la contestación a alguna declaración que haya vertido en los últimos días en contra de las políticas de seguridad de la provincia de Buenos Aires.
La sobrina del juez, María Sánchez, aseveró que fue secuestrada por tres individuos que se movilizaban en un automóvil Ford Ka, y que la capturaron en el momento en el cual salía de la Facultad de Informática de La Plata.
La víctima hizo la denuncia en la comisaría de Tolosa y expresó que había sido liberada en las calles 7 y 513 de esa ciudad, y que en ese momento los secuestradores le habían dicho que se trataba de "un susto" para su familia.
Asimismo, el magistrado apuntó que no pasa por su mente pensar que se trató de un de un mensaje desde la política, ya que durante la última semana cuestionó en duros términos las medidas de seguridad que se instrumentaron desde el Ministerio de Seguridad bonaerense.
También, opinó que el hecho “no tiene absolutamente nada que ver con un secuestro extorsivo” y recalcó su intención es buscarle a la situación una “significación distinta”, ya que consideró que si fuera una cuestión política diría que esta en un país “invivible".
De ese modo, conjeturó que el secuestro puede obedecer a "alguna causa que está a punto de ser resuelta”, aunque aseguró que si con esta metodología quieren
hacerlo callar, lo único que provocarán es que “hable más” y adelantó que seguirá “opinando".
Por su parte, la sobrina del juez expresó que fue intimidada "por la actividad" de su tío, pero remarcó que ella no tiene "la culpa" de que el magistrado "haya
elegido esa profesión".