Anoche, a última hora la Policía Federal allanó el domicilio particular de Cárdenas, en la calle Arroyo, en pleno barrio de Recoleta, en busca de agendas que permitan acreditar los contactos del banquero, que sigue inhallable para el juez, que quiere volver a interrogarlo como testigo.
Fuentes cercanas al banquero indicaron que del allanamiento lo policía sólo se llevó un índice telefónico. Fue el cierre de un día que comenzó con la prohibición de salida del país de Cárdenas, quien para la Dirección General de Migraciones sigue en el territorio argentino, aunque su abogado, Oscar Salvi, asegura desde la semana pasada que está en Sudáfrica.
En el juzgado consideraron como “muy rara” la existencia deversiones encontradas y recordaron que el estudio que encabeza Salvi es “serio” por lo que descreen que desde allí se haya difundido una información falsa en torno al paradero del banquero, quien tampoco declaró en el Senado de la Nación.
El mismo Salvi indicó esta tarde que Cárdenas “está afuera del país desde el jueves”, y que “esperaba comunicarse con él en las próximas horas”.
Según el informe que Migraciones le envió a Bonadío ayer, los últimos movimientos del banquero fueron el regreso al país el dos de octubre procedente de Uruguay donde haba viajado el día anterior.
Las fuentes admitieron que, de confirmarse que Cárdenas aún está en la Argentina, “podría disponerse su captura para lograr el comparendo” ante el juez.
El juez quiere volver a interrogar a Cárdenas porque fue uno de los que participó en reuniones confirmadas con los embajadores de Estados Unidos y el Reino Unido donde, según afirma el periódico inglés Financial Times, se habló sobre el “malestar” por el presunto pedido de coimas.
El mismo Cárdenas en su primera declaración ante Bonadío confirmó la reunión pero -al igual que sus colegas Manuel Sacerdote del BankBoston y Carlos Giovanelli, del Citibank- negaron que se haya dado cuenta de las supuestas coimas.
Por otra parte, trascendió en fuentes judiciales que el juez Bonadío hizo lugar a un extenso pedido de nuevas declaraciones testimoniales que le solicitó el fiscal de la causa, Guillermo Marijuán.
Entre las nuevos testimonios que se vienen figuran los de las secretarias y colaboradores directos del lobbysta Bercún y de los banqueros Giovanelli, Sacerdote y Cárdenas.