Béliz aseguró que el nuevo fuero “nos va a garantizar la capacidad sancionatoria de los incumplimientos de la ley” y constituyen “una medida central del Gobierno en materia de lucha contra la corrupción y la evasión impositiva, por lo que queremos dar el máximo de impulso para que las cosas puedan funcionar de la mejor manera”.
“De acuerdo a lo que nos están diciendo las autoridades administrativas del Poder Judicial, esto se podrá poner en marcha hacia fines de julio o principios de agosto, ya que ha habido una cesión de estos inmuebles, a titulo de comodato, por parte del Banco Central”, explicó.
Los tres juzgados cuyos titulares ya se encuentran nombrados funcionarán en la calle Cerrito 264 de esta capital.
Las explicaciones acerca de la demora en la puesta en marcha del fuero, corrieron por cuenta esta vez del flamante ministro de Justicia y apuntan al mobiliario y a la instalación “del sistema informático para que el tribunal empiece a funcionar”.
Reiteró en ese sentido que “los fiscales ya han sido designados por la Procuración General de la Nación y las partidas ya están libradas para que empiecen a funcionar”.
Aseguró, asimismo, que se tratará de “juzgados modelo, que funcionarán en las mejores condiciones, para que haya una rapidez en la resolución de los casos y para que los que estén litigando en estas causas tengan comodidad e inmediatez”.
Asimismo, explicó que paralelamente “se está trabajando en los tribunales de ejecución fiscal, que es el último proceso de la cobranza del crédito fiscal, que también es central para los ingresos públicos”.
Béliz realizó la recorrida acompañado por el titular de la Administración federal de Ingresos Públicos (AFIP), Alberto Abad quien advirtió que “no es fácil hacer un cálculo numérico” de lo que se piensa recaudar a partir de la creación del nuevo fuero.
“Lo central de esto es la sensación de percepción de riesgo” para los evasores, señaló además de ponerle punto final a la “impunidad para el incumplimiento de la ley en los aspectos tributarios”. “No se cuál va a ser el impacto numérico, pero el impacto en términos de seriedad institucional es muy grande”, concluyó.