El juez federal Jorge Luis Ballestero desestimó una denuncia contra un dirigente piquetero acusado de “incitación a la violencia colectiva” en declaraciones a un programa de televisión. Fuentes judiciales indicaron que la medida benefició a Amancay Ardura, dirigente de la Corriente Clasista y Combativa, quien había sido denunciado por sus dichos en un espacio periodístico emitido el 30 de junio de 2002, cuatro días después del asesinato a manos de la policía bonaerense de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. En aquel momento, dijo que “el pueblo está aprendiendo a gobernar mediante la práctica que le está dando la autogestión y la construcción, desde abajo, de la experiencia de poder”. Por esas palabras, el fiscal federal José Barbaccia lo denunció de oficio por “la presunta comisión del delito de incitación a la violencia colectiva”. Sin embargo, el fiscal que intervino luego, Carlos Cearras, opinó que los dichos del dirigente piquetero “se encuentran dentro de los límites del amparo constitucional de la expresión de ideas y no merecen reproche penal alguno”. Por su parte, al desestimar la denuncia, el juez Ballestero entendió que “las declaraciones apuntadas no hacen más que reflejar la opinión del entrevistado sobre la situación del país al momento de la realización de la nota en una coyuntura político-social extremadamente tensa”, afirmó Ballestero.
Sobreseidos
Por medio de un juicio abreviado, se dispuso el sobreseimiento de un activista Greenpeace acusado del presunto robo de un tronco talado de la empresa Maderas Perarnau, de Canet de Mar en el marco de una campaña ecologista contra la tala indiscriminada de árboles. La causa se originó por una denuncia de supuesto robo que hiciera la empresa maderera contra integrantes de la ONG ecologista luego que ésta entregara un tronco a la Delegación del Gobierno en Cataluña.
El juez que celebró el juicio rápido, dispuso el sobreseimiento y archivo de la causa con la condición de que los activistas devuelvan el tronco a la autoridad judicial que aparentemente se encontraría, según publica el periódico europapress.es en uno de los barcos de la organización ecologista.Fuera de los juzgados, los demás miembros de la organización continuaron con las protestas de manera pacífica disfrazados de árboles.