En respuesta, Caminos afirmó que “dicha de esa manera, sin precisión alguna que delimite sus alcances, resulta susceptible de dejar en el exterior la errónea e injusta impresión de que pueden tratarse de conductas generalizadas que involucran a un importante porcentaje de jueces o que, cuando menos, se tolera pasivamente esa forma de criminalidad, de la que, dicho sea de paso, hasta ahora no se tiene un conocimiento cierto y concreto”.
En esa línea, agregó que en nuestro país “la inmensa mayoría de los jueces se conducen con probidad y equidad; investigan y sancionan enérgicamente los aislados casos de corrupción que se producen en su seno y que son denunciados, porque no están dispuestos a encubrirlos por un falso sentido corporativo; se preocupan, como nunca antes, por su formación y capacitación para estar a la altura de las exigencias de la sociedad actual; realizan ingentes esfuerzos por recuperar la confianza ciudadana en la Justicia, y todo cuanto se relaciona con los comportamientos éticos es hoy materia de constante discusión y tratamiento”.
Puntualizó también que a raíz de esa publicación pueden formarse una imagen distorsionada de los jueces argentinos el Presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial del Reino de España, invitados a participar los días 2 y 3 de octubre próximo en las Jornadas Internaciones sobre Ética Judicial.
“La cuestión es tanto más trascendente por la influencia que tiene su palabra en virtud del cargo que ocupa, el indudable prestigio internacional del que goza, y por haber sido integrante de la Justicia Nacional y ejercido la profesión de abogado en este medio”, descomprimió finalmente Caminos, agregando que “como descontamos que hubiese estado en su ánimo agraviar a la magistratura argentina, aguardamos de Ud. una aclaración que prontamente coloque las cosas en su debido lugar y dimensión”.
Moreno Ocampo había apuntado en ese reportaje principalmente a jueces con importantes causas ligadas a ex riñones del poder político, magistrados a las cuales apuntó con más tenacidad al dar a entender que ya no es nada difícil juzgar a personas que han sido muy poderosas en su momento, pero que actualmente no tienen nada de peso sobre la justicia.