En ese sentido, recordó que se ordenó transferir al Consejo de la Magistratura a los demás empleados y funcionarios que se desempeñan en las restantes áreas del tribunal, con la prevención de que aquellos mantenían las categorías alcanzadas y todos los derechos, beneficios y prerrogativas inherentes a su condición de integrantes del Poder Judicial.
Al respecto, los jueces aseveraron que frente a las restricciones presupuestarias existentes se debe valorar la necesidad de adoptar respuestas en las que impere un criterio de austeridad y prudencia, potenciando los recursos materiales y humanos de la manera más eficiente.
Entonces, entendieron que el Cuerpo de Auditores, la Oficina de Mandamientos y Notificaciones y la de Subastas Judiciales cuentan con una estructura de funcionarios y empleados con un alto grado de capacitación en las funciones asignadas y que sobre la base de la magnitud de la planta con que cuenta y de la sede afectada, se encuentra en condiciones aptas para asistir al Consejo en ciertas competencias que la CN le asignó a ese órgano.
Además, el máximo tribunal por medio de la acordada 24/03 dispuso la creación de la Secretaría nº 5 que de ahora en más entenderá en la distribución de expedientes judiciales, en la coordinación de las relaciones funcionales e institucionales del Consejo de la Magistratura, y en las comisiones especiales que encomiende el tribunal.
También la nueva dependencia atenderá en las causas de naturaleza electoral, en las que conciernan a la designación y destitución de magistrados, en las denuncias por retardo o privación de justicia, en las presentaciones varias que no sean de naturaleza penal, en todos los juicios en que sea parte el Poder Judicial de la Nación y en las acordadas y resoluciones que la Corte disponga.