Diario Judicial: ¿Qué pretende el proyecto presentado por el bloque del Partido Socialista de la cámara baja del Congreso al despenalizar la tenencia de drogas para consumo personal?
Jorge Rivas: Le puedo decir que es un proyecto de ley, que tiene como mentor a Eduardo Garcia, que es miembro por Córdoba de nuestro bloque y que fue presentado por toda nuestra bancada. Lo que pretende principalmente es modificar la actual Ley de Estupefacientes, retrotrayendo la actual legislación a la que existía en 1989, es decir que la tenencia para consumo personal no este criminalizada, ni penalizada.
DJU: ¿Cuáles son los motivos que llevaron a retomar la idea de despenalización de la tenencia para consumo personal?
JR: Los motivos de esto tienen que ver con que los 14 años de la ley tal como está hoy en día, no han resuelto los problemas para los cuales había sido sancionada en su momento. Quiero decir que el hecho de penalizar la tenencia para consumo personal no logró ni combatir el narcotráfico, ni proteger a la denominada salud pública.
DJU:¿Qué advierte en estos últimos años con la aplicación de esta norma?
JR: Creo que después de 14 años, uno puede ver que la Argentina dejó de ser un país de tránsito, para pasar a ser un país de consumo y de lavado de dinero, y tampoco logró frenar la cantidad de consumo, sino que muy por el contrario el problema se ha agravado en forma notoria.
DJU: Además, en su actual redacción de ¿la ley no se contrapone a la Constitución Nacional?
JR: Es verdad, tal como esta redactada es violatoria del articulo 19 de la Constitución Nacional, el que menciona que los actos privados de los hombres están exentos de la autoridad de los magistrados y agrego que ese tópico más el de la criminalización de la víctima no es la solución para combatir la proliferación de la drogadicción, lo cual nos lleva a entender que es necesaria la reforma que pretendemos.
DJU: Teniendo en cuenta las diferentes posturas de la sociedad argentina ¿cómo cree qué puede llegar a ser tomado este proyecto por la opinión pública?
JR: Sabemos y tenemos la convicción de que se trata de un proyecto polémico, que puede generar posiciones distintas y antagónicas, y hasta creemos que puede darse el caso de una cierta trasversalidad, dado que puede haber legisladores de algunos bloques que pueden estar de acuerdo con éste; de hecho nos apoyan legisladores del Frente Grande, la Unión Cívica Radical y el ARI.
DJU: ¿Qué sucede con las causas que se inician en la justicia federal por la tenencia de drogas para consumo personal?
JR: El fuero judicial que entiende es el federal y lo que está demostrado en forma estadística, es que del total de causas referidas a tenencia de estupefacientes en un semestre, de los implicados no habían sido encarcelados con anterioridad el 97, 8 por ciento, no tenían armas el 90 ,8, no estaba cometiendo otro el delito el 97,3 y tenían menos de 5 gramos el 87, por ciento. Otro dato a tener en cuenta es que, casi el 70 por ciento de las causas en el fuero federal están relacionadas a la tenencia de estupefacientes para consumo personal y de ese modo el Poder Judicial se ve con causas que luego terminan con el sobreseimiento o el archivo y donde sólo el 1 o 2 % llega a juicio. Por eso se puede ver varios jueces federales que están de acuerdo con este proyecto, dado que son los que mejor entienden que la criminalización de la víctima no es la mejor solución para el tema. El Estado debe entender que con perseguir al adicto no esta cumpliendo su rol y por eso es necesario que comience a trabajar en su verdadero rol de prevención.
DJU: Si bien, la ley no ayuda al adicto, ¿tuvo algún efecto positivo en lo que hace a perseguir y condenar a los narcotraficantes?
JR: En Argentina casi no existen narcotraficantes detenidos, ni tampoco existen detenidos que estuvieran vinculadas al lavado de dinero que provenga del narcotráfico, por lo que podemos ver que esta ley no arroga saldos positivos.
DJU: A fin de interiorizarse en la cuestión, obtener respuestas o posiciones ¿mantienen reuniones con sectores vinculados a esta problemática?
JR: Casualmente tuvimos un encuentro con el SEDRONAR, con la idea de trabajar despojados del prejuicio, entendiendo que los que estamos realizando la propuesta no pretendemos realizar una apología del consumo, sino más bien todo lo contrario y entendiendo que la ley tal como esta redactada es totalmente inoperante. Me parece que seria un salto cualitativo importante para la sociedad argentina el hecho de que se sancionara esta reforma.
DJU: Para que llegue a concretarse este proyecto ¿es necesario un evolución de la sociedad civil?
JR: Me parece que en estos temas muchas veces la sociedad civil, esta mucho más evolucionada que la propia sociedad política, pero aclaremos que los tipos debates que se realicen se deben llevar a cabo con un alto grado de conocimiento técnico, pero también y no menos importante con un alto grado de permeabilidad del conflicto social imperante.
DJU: ¿De que manera influye la problemática social?
JR: Tengamos en cuenta que hace dos década atrás las capas más jóvenes accedían a las drogas como una trasgresión a la sociedad, pero en la actualidad la mayoría busca los estupefacientes como un modo de poder sobrellevar la situación de incertidumbre que le genera la crisis social que se vive. Me parece que cada uno de nosotros ante la eventualidad de tener un amigo o un hijo en calidad de drogadependiente no le aplicaría la criminalización como criterio, sino que vería la forma de ayudarlo para que salga de esa situación que enfrenta.