Fuentes de la investigación confirmaron a Diariojudicial.com que entre la documentación secuestrada figura el registro diario que realizan los pilotos. De allí, se desprendería un dato que puede ser fundamental: el piloto que voló en ese avión el día anterior al incidente habría reportado que se encendió el aviso de emergencia en el tren de aterrizaje.
Las fuentes indicaron que el juez Galeano esperaba para estas horas la confirmación oficial del dato, para incorporarlo al expediente y ordenar nuevas pericias y, eventualmente, más allanamientos.
Galeano encabezó en persona el procedimiento del martes, junto a la secretaria federal Susana Spina y el fiscal Guillermo Marijuán, que incluyó una visita a los hangares de Aerolíneas para revisar una nave similar, conocer el tamaño de la rueda que perdió el avión y el sistema de seguridad del tren de aterrizaje.
Una hipótesis que se consolida en el expediente es que el avión partió sin una pieza de soporte ya que la misma –según los informes preliminares- no se encontró junto a la pista ni sobre la avenida Costanera o incluso más allá, en el Campo de Golf donde el neumático terminó su carrera.
El avión –un MD-83- transportaba 151 pasajeros y 6 tripulantes, y se dirigía a Puerto Iguazú, pero al perder la rueda debió aterrizar de emergencia en el aeropuerto internacional de Ezeiza, en una operación sin víctimas ni lesionados.
Enseguida, la empresa Aerolíneas Argentinas aseguró que se trataba de “un incidente menor” y negó que se debiera a la falta de mantenimiento del aparato.
Pero de la documentación secuestrada por la justicia el martes se desprendería, según las fuentes, que el tren de aterrizaje fue renovado hace poco más de un mes, aunque nada se dice del aviso del piloto que, parecería, se desatendió.