A efectos de lograr dicho objetivo con la menor erogación y la mayor rapidez posible, se buscará solventar el proyecto a través de la financiación mediante créditos procedentes de organismos internacionales y el aporte de empresas con actividad en el país.
El proyecto de la Defensoría General contempla que el nosocomio sea construido con un grado de complejidad 4, que permita atender la salud física, psíquica, adicciones y desintoxicación (sin perjuicio del funcionamiento de un centro de rehabilitación para adultos) con una superficie total calculada inicialmente en 80 mil metros cuadrados, 500 camas, salas de terapia intensiva y media, quirófanos y áreas de servicio necesarias.
Actualmente, los hospitales penitenciarios de las unidades 16 y 1 se encuentran desactivados al igual que esos establecimientos. El Complejo Penitenciario Federal Número 1 de Ezeiza tiene un pabellón hospitalario que fue construido junto a los módulos de alojamiento de detenidos, pero que nunca fue habilitado ni puesto en marcha en tanto no se lo dotó de una planta de personal y en la actualidad las instalaciones y equipamiento se hallan deteriorados.
En tanto, el Hospital Penitenciario Central de Devoto está obsoleto, con infraestructura insuficiente, no tiene quirófanos y sólo es usado como sala de internación, sin que se practique ningún tipo de cirugía.
Se indicó que sería auspicioso la construcción se haga en terrenos pertenecientes al Servicio Penitenciario Federal en la zona de Ezeiza o en una zona en la cual se facilite el acceso al público en general.
Una parte del nuevo hospital (aproximadamente un 40 % de su capacidad total - 200 camas), construido con las condiciones de seguridad necesarias, será destinado a la atención de las personas privadas de su libertad y alojadas en unidades del Servicio Penitenciario Federal de Capital Federal y Gran Buenos Aires o de los casos que sea necesario tratar a internos procedentes de otros puntos del país.
Está previsto que el plantel de personal médico, paramédico, de enfermería, técnico y administrativo será único y para todo el establecimiento, con dependencia del Gobierno de la Nación o de la provincia de Buenos Aires, y con la debida asistencia presupuestaria garantizada por el Estado.