Plomeros, carpinteros o albañiles incumplidores, vecinos molestos, paternidades dudosas y hasta vestidos arruinados por baldazos de lavandina formaron parte de las 11.774 consultas ingresadas durante el 2004 a los centros de asistencia jurídica y mediación comunitaria dependientes del Ministerio de Justicia. Del total, el 50%, unos 5865 casos, llegaron a la oficina del barrio de Monserrat. El resto se repartieron entre Cabalito (21%), La Boca (8%) y Liniers (21%).
Los datos surgen de una proyección, todavía no están los datos finales, realizada por la Dirección Nacional de Promoción de Métodos Participativos de Justicia, que depende del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
La mayor parte de las consultas estuvieron relacionadas con conflictos entre vecinos -como ruidos molestos- pero también hubo preponderancia de trabajos mal hechos por carpinteros, albañiles, plomeros o contratos de alquiler incumplidos por alguna de las partes. El servicio de asesoramiento y mediación es gratuito y voluntario, aunque este año se registró un 98 por ciento de cumplimiento de los acuerdos alcanzados.
Durante 2004, hubo 8.942 casos en que abogados de los centros de mediación asesoraron a quienes recurrieron en busca de ayuda y los derivaron a las áreas que correspondían por el tipo de problema.
En 2.832 casos hubo mediación a cargo del mismo centro. Los temas familiares, contratos entre privados, laborales y vecinales estuvieron al tope del ranking de problemas. En uno de los centros se medió a pedido de un hombre que reclamaba la paternidad de un nieto, negada por su madre. El vecino insistía en realizar un ADN al pequeño, algo que finalmente se consiguió en el centro de mediación, de donde salió la orden para el análisis en el hospital Durand. Así se evitó la apertura de un juicio de filiación: el resultado favoreció al hombre, que resultó ser el padre biológico de la criatura.
Según las estadísticas, a las que tuvo acceso este medio, del total de 2.832 casos de mediación, 1054 casos, un 37%, se trataron en el centro del barrio de Monserrat. El resto se repartieron de la siguiente manera: 605 en Liniers, 958 en Caballito y 215 en La Boca. Si son clasificados por tema, los casos de mediación arrojaron un 31% de casos de familia, un 28% de contratos, un 7% de cuestionaos laborales y un 11% de propiedad horizontal.
En otro caso, una señora llegó a un centro de mediación con un vestido arruinado por la lavandina. Esa prenda tenía un valor sentimental importante para ella y había sido alcanzada por un baldazo de agua y lavandina arrojado desde la terraza de un edificio: los abogados citaron al administrador. El hombre admitió que ese día se lavaba en la terraza porque se habían hecho refacciones y que se usó lavandina. Finalmente el consorcio de propietarios pagó el vestido a la mujer.
Teniendo en cuenta los resultados, las estadísticas demuestran que un 22% de los casos mediables terminaron con acuerdo (610 casos), un 7% sin acuerdo, un 24% fueron desistidos con presencia de parte, un 20% fueron desistidos sin presencia de parte y el 27% quedaron pendientes.
El acuerdo entre las partes es voluntario, como lo es también la respuesta del demandado a la citación que se le cursa. No obstante, este año hubo un nivel de concurrencia del 80 por ciento.
dju / dju
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