B) CONSULTOR. Número uno de la inteligencia americana -CIAy FBI- se transformó Galeano y su grupo de investigadoresfederales, que dirige el comisario mayor Jorge "Fino" Palacios,establecido, desde el momento mismo de los atentados en las"Twin Towers" de Nueva York y en el Pentágono de Washington, enla Triple Frontera de Argentina, Paraguay y Brasil. Pero estaaproximación no fue sólo de los sectores judiciales -al menosya hay tres jueces federales en línea directa con la embajadade Estados Unidos, además de Galeano, le siguen Gabriel Cavalloy María Servini de Cubría- sino también de la SIDE, cuyarelación con la CIA y con el resto de la comunidad deinteligencia norteamericana era totalmente fría desde que sefiltró a un diario porteño la foto del ex jefe de la Centralde Inteligencia Americana en Buenos Aires, Ross Newland. Elhecho se convirtió en su momento en una "cuestión de Estado", peroel terrible atentado contra los objetivos civiles enEstados Unidos ha permitido disipar todo malestar anterior: "la relación con los americanos es excelente", dijo a este diario un colaborador del espía mayor, Carlos Becerra.
C) INFORME. Que no sabe porqué no se siguió pero que permiteestablecer como es que Ciudad del Este es una base de actividades deelementos extremistas del Hezbollah, de Hamás, de la JihadIslámica, de Al Qaeda (vinculada con Osama Bin Laden) y de otras organizaciones terroristasfundamentalistas musulmanas, fue el que le hizo llegar laInteligencia Militar al ex jefe del Ejército, Martín Balza yéste -se supone- debe haberla girado a sus superiores en el exgobierno de Carlos Menem -ministro del Interior era CarlosRuckauf- y por, consecuencia, al juzgado de Galeano. Esainformación daba cuenta de dos integrantes de Hezbollah,Mohamed Yaguin y Hassan Mohamed Alí Euzinad, que estuvieronen la Argentina unos meses antes del ataque terrorista a laAMIA. Los musulmanes que ingresaron con pasaportes libanesestomaron un avión de Varig hasta Sao Paulo (Brasil) y desde allíhasta Beirut, previa escala en Madrid, en un avión de Iberia.En el medio del fárrago de informaciones de ese momento, nohubo mayores precisiones en el juzgado de Galeano pero se sabeque estaba firmado por el propio ex jefe de Inteligencia delEjército (GII), general (RE) Jorge Miná.
D) DATOS. Nuevos sobre el agujero negro que significan losmovimientos financieros en el área de salud del gobierno tieneentre sus manos el juez Cavallo, quien analiza si debeexcusarse o no de la causa por el hecho de que uno de losfuncionarios a investigar es Héctor Lombardo, que además es un respetado pastor evangélico, como el juez. Ya existe un caso anterior en que Cavallo decidió apartarse de una investigación que involucraba al ministro de Salud por esta coincidencia religiosa. Pero Cavalloo el juez que lo subrogue deberá meter mano en la sospechosaintervención de la Obra Social del Ministerio de Economía enmarzo del año 2000. En ese momento la OSME tenía 95.000afiliados, recaudaba $ 5 millones por mes y tenía un pasivo de$ 28 millones. Pero en abril de este año cuando el interventordesignado por Rubén Cano, superintendente de los Servicios deSalud y hombre de confianza de Lombardo, se presentó en convocatoria de acreedores con todos los servicios médicos cortados, declaró un pasivo de $ 35 millones, una recaudación mensual de $ 2 millones y 58.000afiliados. En ese interín hubo cambios de toda la estructuraprestacional, cuyos nuevos adjudicatarios no habrían cumplidocon las condiciones mínimas que establece la Superintendenciade Salud. También llamó la atención en fuentes judiciales quela OSME se encuentra asistida en la convocatoria de acreedorespor una consultora desconocida y cuyo titular tendría decretadasu propia quiebra.
E) A BAJA ALTURA. Fue el comentario escuchado en selecto barde Avenida Libertador entre importantes economistas, uno deellos experto piloto profesional, y hombres de la Justiciasobre los dos accidentes áreos que conmovieron a la opiniónpública y sobre los que existen serios cuestionamientos a lainvestigación judicial: el primero es el de Austral LíneasAéras, cuyo avión cayó sobre la localidad uruguayade Fray Bentos, muriendo todos sus ocupantes. En este caso la mayorresponsabilidad habría sido del piloto, que sólo se preocupó porla pérdida del medidor de combustible y no chequeó el resto delos instrumentos, lo que lo llev¢ a poner el avión en picada con los motores a fondo, provocando la tragedia y el segundo,fue el choque del Boeing de LAPA al despistarse en elAeropuerto metropolitano. En esta privilegiada mesa, se dejaronde lado por un momento las viscitudes del riesgo país y las de laley de déficit cero, para incursionar en las responsabilidadesde esas catástrofes: el profesional -cuyo nombre se reservapero es un experto que se chequea periódicamente en EstadosUnidos-, reveló pormenores del informe de la Junta de Accidentes Aéreos de ese país, con inquietantes conclusiones, aunque para muchos sigue siendo un enigma el verdadero estado sicológico de los pilotos, sobre todo en el accidente de LAPA.