El juez militar chileno Juan Arab condenó este jueves
a cinco de los siete militares acusados por incumplimiento de deberes y cuasi delito de homicidio por la muerte en 2005 de 44 soldados y un sargento en Antuco, zona de la alta cordillera ubicada en el sur de Chile.
La tragedia ocurrió el 18 de mayo de 2005 durante una marcha de conscriptos que cumplían con el servicio militar obligatorio, gran parte de los cuales
murieron congelados por una tormenta de nieve que no fue prevista por sus superiores.
El ex mayor Patricio Cereceda, jefe del batallón que cumplía su período de instrucción en la cordillera de la VIII región de Chile, fue condenado a
5 años y un día de prisión efectiva, por su responsabilidad en la muerte de los soldados.
El coronel Roberto Mercado, ex comandante del Regimiento Reforzado Nº 17 de la ciudad de Los Angeles, recibió una pena de 3 años que cumplirá en su domicilio,
por incumplimiento de deberes militares.
En tanto, los capitanes Claudio Gutiérrez y Carlos Olivares, fueron condenados a
840 días de cárcel domiciliaria, por cuasidelito de homicidio. Por último el teniente coronel Luis Pineda, a quien se acusó de haber ocultado información respecto de la tragedia, fue condenado a 541 días por incumplimiento de deberes militares.
La marcha que causó la muerte de 44 reclutas y un sargento, no contó -según el magistrado- con una preparación y un estudio más acabado, porque desde hace 10 años que no se realizaban en el lugar elegido.
Los militares absueltos fueron el sargento Avelino Tolosa y el suboficial Carlos Grandón. Pese a la trascendencia del caso y de las figuras implicadas, el juez Arab aseguró que
no recibió ninguna presión del Ejército a la hora de dictar las sentencias.
Se espera para los próximos días que los condenados apelen estas sanciones, que provienen de un juez de primera instancia.
Por su parte, el abogado de algunas de las víctimas de la tragedia, Raúl Meza, calificó las condenas como
“una vergüenza para la justicia chilena”. Meza señaló que exigirán que se recalifique el delito de Cereceda desde “cuasidelito” de homicidio a homicidio simple, que significaría una pena superior a los diez años de cárcel.
En tanto, la hermana del único militar de carrera fallecido en el siniestro (los demás cumplían el servicio obligatorio), Luis Monares, sostuvo que el juez “se está quedando en el camino, igual que el alto mando, porque sabe que hay más responsables y se están callando”.
dju / dju
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