El amparo, que fue presentado ante los estrados de la Justicia Federal de la Ciudad de Mercedes el día 21 de este mes, fue confeccionado bajo el patrocinio letrado de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas –AAdeAA-, el cual ha sido impulsor de otras acciones como, por ejemplo, el amparo ambiental para el saneamiento del rió Reconquista.
El expediente recayó en el Juzgado Federal Nº 1 de Mercedes, y los autos están caratulados como “Silva Matías y otro c/Universidad Nacional de Luján y otro s/amparo”. Se codemandó al Ministerio de Planificación Federal, y se citó como tercero a la empresa Concesionaria del Oeste S.A.
De ponerse en marcha las obras, se talarían árboles del predio de la Universidad, afectándose así al ecosistema de la zona, sin que exista en la actualidad un estudio serio del impacto ambiental que producirá dicha acción del hombre.
La contaminación trascenderá la naturaleza y afectará incluso a los estudiantes de la Universidad, ya que el predio quedará dividido en dos por la autovía; mientras que los vehículos circularán a gran velocidad a tan sólo 50 metros de la Biblioteca de la institución.
Según comunicaron los abogados patrocinantes, quienes realizaron la planificación de la autopista no habrían observado las exigencias emergentes de la Ley provincial 11.723 y la Ley nacional 25.675, entre otras, y han incumplido con las etapas de Audiencia Pública y Evaluación de Impacto Ambiental.
A diferencia de otros casos de contaminación, los efectos nocivos de obras no sustentables no sólo afectarán a la flora, fauna y aguas del lugar, sino que además podría perjudicar la calidad educativa del establecimiento a raíz de las importantes molestias sonoras que padecerán tanto alumnos como profesores.
La Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas sostuvo que no es voluntad de los estudiantes y de la asociación ir en contra del desarrollo de las vías de comunicación entre Luján y Mercedes, sino que se oponen a la construcción de caminos sin una seria planificación ambiental y social.
En caso de que se paralizen las obras y se obtenga un informe de impacto ambiental favorable a los actores, se deberá planificar la construcción de la autovía en otro predio más adecuado, a fin de preservar no sólo factores ambientales, sino también valores sociales.