La investigación arrojó que de 48 gobernadores y vicegobernadores provinciales, las mujeres sólo ocupan 1 gobernación y 7 vicegobernaciones, lo que representa un 16,6 por ciento.
Además, en los Ministerios de Salud (conducido por Graciela Ocaña), de Defensa (dirigido por Nilda Garré) y de Relaciones Exteriores ninguna mujer ocupa cargos jerárquicos de secretaria o subsecretaria, y en se sentido, el informe, destacó el hecho de que en los das dos primeras carteras estén conducidas por mujeres.
Sin embargo, es en el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, donde la ausencia de mujeres más se nota. Es que ninguna mujer fue designada en las tres secretarías, y hay una sola mujer sobre catorce subsecretarías, señala el informe.
Según la Ombudsman porteña, Alicia Pierini, el objetivo del relevamiento es “destacar la importancia de respetar la igualdad de oportunidades en los ámbitos de decisión”.
Además, Pierini destacó que la Defensoría que ella dirige, hay un 50 de mujeres que trabajan sobre el total de empleados que lo hacen.
“Debe tomarse conciencia de la necesidad de incrementar la participación de las mujeres en las decisiones ejecutivas”, concluyó Pierini.
En el informe, el cual puede verse en la página www.defensoria.org.ar, la Defensoría presenta cuadros detallados sobre la participación femenina en cargos del Ejecutivo Nacional, así de la situación actual en las provincias.
Al mismo tiempo, la poca presencia femenina también se hace evidente en el Poder Judicial, sobre todo “en los altos cargos jerárquicos, como lo son los superiores tribunales de Justicia de las provincias, o en las Cámaras”, según lo afirmó en diálogo con DiarioJudicial.com la Presidenta de la Asociación de Mujeres Juezas María Cristina Caamiña.
“Somos minoría”, remarcó Caamiña, quien además se desempeña como jueza de un Tribunal Oral en lo Criminal de la Capital Federal.
Sin embargo, la jueza aseguró que en los fueros de familia y menores, allí la cosa es distinta, porque “está atiborrado de mujeres”, y al mismo tiempo que en los juzgados de primera instancia “la situación es más pareja” en comparación con los hombres.