Según voceros del proyecto, la iniciativa será aplicada en 14 ciudades, en las cuales se registra el mayor número de explotación de menores. Las localidades elegidas sólo están separadas por una calle o puente que divide a los poblados. Se prevé que con la iniciativa, serán reforzadas la vigilancia en las fronteras y regiones donde se desarrolla con mayor libertad e impunidad la actividad de los traficantes de personas.
En una primera etapa del proyecto, se buscará elaborar un diagnóstico de las situaciones locales, capacitar a los operadores, por lo que policías y autoridades judiciales serán entrenados en la prevención y combate del tráfico, donde además, se habilitará una línea telefónica para denuncias anónimas.
A su vez, se puntualizó la necesidad de "armonizar las legislaciones", para no obstaculizar las disposiciones que puedan adoptarse en las zonas de conflicto. El programa está financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo, y fue suscrito en Brasilia durante la 14a. Reunión de Altas Autoridades de Derechos Humanos y Cancillerías del Mercosur y Estados Asociados.
Sobre el tema, hay que destacar que la región recibe anualmente millones de personas con el objetivo de experimentar el turismo sexual, donde las principales víctimas son los menores de edad, de ambos sexos, los cuales por vivir en una situación de precariedad y necesidad, son obligados a sufrir todo tipo de abusos sexuales, y de prostituirse desde edades muy tempranas.
Al respecto, hay diversas normas que regulan la materia y que intentan castigar estos actos, como el Protocolo Facultativo de la Convención de los Derechos del Niño, que establece que los responsables deben ser criminalizados y castigados, porque estos delitos son considerados de lesa humanidad.
Adicionalmente, en el año 2007, Argentina aprobó la creación del programa de “Prevención de la Trata de Personas y Asistencia a sus Víctimas”, donde se detalla que cualquier persona que haya sido víctima del delito de tráfico de personas o sepa de alguien que es sometido a este delito, pueda denunciar ese abuso y recibir asistencia.
Cada año se producen más de 600 millones de viajes turísticos internacionales, donde más de 3 millones de personas buscan sexo con niños. Según datos de organizaciones internacionales, se estima que el Turismo Sexual infantil afecta a más de dos millones de niños, niñas y adolescentes en el mundo, y es un fenómeno que en estos últimos años se ha extendido por diversos lugares, en especial por sectores de Latinoamérica.