"La resolución judicial no es necesariamente la mejor"

 

 

Planteamos un modo de trabajo participativo para obtener un código que tuviera todo el consenso posible y que reflejara realmente las ideas más importantes de la comunidad jurídica. Invitamos a todo quien tuviera interés y que quisiera contribuir con alguna idea o proyecto. Y por otro lado nosotros hemos hecho con casi 90 juristas 31 subcomisiones repartiendo 31 temas distintos. Le pedimos que hagan un informe preliminar y ya los estamos recibiendo. Y nosotros mismos todo el tiempo nos vamos reuniendo, consensuando. Tomamos como base el Código de 1998 pero no quiere decir que lo vamos a copiar. Lo hicimos para que los convocados empiecen por algún lado

 

 

Básicamente esto es una unificación del Código Civil con el Comercial. Por un lado, trataremos de simplificarlo y aligerarlo un poco de tantos artículos que son excesivos. Pero también incluir las figuras y elementos nuevos dentro de los que haya consenso. La idea es hacer un Código con artículos nuevos y no reformas parciales, aunque se repita mucho de lo que estaba de antes.

 

 

Todavía no hay decisiones tomadas. Hay muchos temas que no están en el Código como la fecundación asistida, cuestiones de bioética, de medio ambiente. Estos aspectos de alguna manera influyen en todo el Derecho. En el caso de los pueblos originarios hay legislación especial pero estamos estudiando la incorporación de la parte de la propiedad al Código porque no está reglamentada. Todo se está estudiando. Estamos tomando en cuenta todos los proyectos que hay, todos los códigos extranjeros que se han reformado, algunas nuevas reformas en Brasil.
 

 

 

 

 

Hay mucha legislación especial y no la vamos a incorporar toda al Código. Esa es una decisión no tocar toda la legislación porque en una reforma al Código Civil y Comercial prácticamente se podría ir tocando toda la legislación de derecho común que existe. La idea no es reformular toda la legislación.

 

 

Por eso mismo buscamos consenso. Las normas desde que están sancionadas se aplican pero si no hay convicción social y ciudadana no es fácil llevarlas a la práctica.

 

 

Esta comisión se creó por un decreto presidencial, otras se hicieron por resoluciones del Ministerio de Justicia. Nos convocó, nos contó algunas preocupaciones en materia de familia, creo que habló de la adopción. Después en su mensaje al Congreso habló de una ley especial en este tema. Mostró un entusiasmo de que esto hay que actualizarlo.

 

 

El Congreso es mucho más que la presidente. Además, vamos a ver porque ahora hay un período electoral. Pero de cualquier manera el apoyo es de la comunidad. Si bien el Congreso sanciona, también recibe lobys. Siempre hay grupos que opinan con algún interés que pueda ver tocado por el contenido del Código. Muchas veces los proyectos de códigos han fracasado no por todo el texto sino por un artículo o dos que son los que por alguna razón algún grupo objeta. La intención es que todo el mundo participe para que no digan que no han tenido la oportunidad de opinar, aunque la decisión final de los que ponemos en el Código sea nuestra. Ciertamente los códigos los han sancionado el Congreso a libro cerrado. No pedimos eso pero normalmente cuando se puede tocar se desarma la coherencia porque cuesta mucho organizar todo un sistema.

 

 

El cuidado de la coherencia porque para hacer una ley sobre un tema hay que pensar en un sólo aspecto. En un código son muchos temas que hay que integrar, es todo un sistema que tampoco tiene que hacer ruido con el resto de la legislación.
 

 

A veces no es todo el código sino algún aspecto. Uno de los que más dificultades trae es el principio de legalidad en penal y la indisponibilidad de la acción, aunque esto también está controvertido si es de fondo o de forma. También la incorporación de la posibilidad en un Código Procesal Penal, o en el Código Penal mismo, de derivar a la resolución alternativa o al programa víctima-victimario sería un aspecto nuevo en penal y un cambio importante. Sobre todo para gente primeriza y descongestionaría todo el sistema carcelario en donde muchas veces los casos menores son los que están llenando el sistema y a veces cosas más difíciles terminan prescribiendo.

 

 

Es relativo. Como en todo habrá quien está de acuerdo y en desacuerdo. Yo no creo que ningún juez pierda poder o quiera tenerlo sobre la gente. Además si se incorpora el juicio por jurados, también pierde el poder de decidir. Los sistemas son variados y uno siempre tiene que estar de acuerdo a los tiempos. Siempre cuando uno está acostumbrado a algo, el cambio cuesta o hay miedo a adaptarse.

 

 

Esto es una idea de que la resolución judicial no es necesariamente la mejor, aunque hay conflictos que sí la necesitan. En los conflictos penales se podrán hacer convenios pero la sociedad también necesita una reparación. Si alguien tiene una mala práctica profesional muy importante no es sólo cuestión de otorgar una indemnización sino también que se inhabilite al acusado. En principio la idea es que la solución judicial no es la mejor. La resolución alternativa permite ver todo el conflicto y no sólo una punta del iceberg que es lo que va a juicio, porque el conflicto es mucho más amplio de lo que se pide en un expediente. Todo se toma en cuenta y así hay más elementos para definir.

 

 

Si, estamos en eso. Todavía hay muchas cosas que faltan. Pero la mediación no sólo en lo judicial. Sino en toda la sociedad porque es un modo de pacificar. Mediación en políticas públicas, en conflictos escolares…

 

 

Sí y esto tiene que ver con el conocimiento de la problemática. Antes no había fallos de violencia doméstica, podía haber un homicidio o lesiones agravado por el vínculo pero no se tomaba una idea de que esto es una problemática como tal. Lo mismo con los medios que no hablaban de la violencia doméstica. El conocer la problemática hace que se la trate como tal, que no sea una mera lesión leve que no merece atención porque hay otros expedientes para resolver. También hemos tenido reuniones con jueces para concientizar de la problemática.

 

 

A los jueces y a la población en general. Era una problemática que si bien existe desde que el mundo es mundo no se tomaba como un caso especial.

 

 

Eso es discriminatorio. Es una idea muy conservadora, muy fuera de época de las mujeres. Hace 38 años que trabajo de mañana, tarde y noche. (risas).

 

 

No. Yo no lo veo así.

 

 

No nos compete a nosotros. Le compete a algún Consejo de la Magistratura o al INADI. Yo no tomo decisión al respecto.

 

 

Creo que la gente confía en esta Corte. Uno está en la Corte porque es un desafío seguir trabajando por acercar la Justicia a la gente y en ese aspecto se va mejorando la imagen de la Justicia. Siempre la imagen. Cuando aparece un caso de un juez que incurre en acciones inadecuadas, ese caso se generaliza. Todos los otros jueces que están trabajando no salen en el diario. Es uno con 100. Creo que va mejorando la imagen y la confianza. Cuando hay un problema real que la gente tiene, va a la Justicia. El que nunca fue a un tribunal habla peor que el que sí concurrió. La lentitud se reconoce. Para eso se está buscando la resolución alternativa de conflictos, el aggornamiento de las notificaciones, la despapelización.

 

 

Habrá que ver cuándo me jubilo (risas). Ya llevo 38 años en la Justicia y por ahora tengo cosas para hacer. No pronostico nada ni en un sentido ni otro.